La grada de Riazor despidió ayer a Juan Domínguez con una gran ovación tras otra buena actuación del canterano, que cerró la goleada de los blanquiazules. "Fue un partido redondo, sobre todo por los tres puntos, que eran muy importantes", manifestó el centrocampista al finalizar el partido. "Estamos en un buen momento, sobre todo en casa", añadió. El futbolista, que aumenta su aportación al equipo con cada jornada, confía en aumentar su "confianza" con el paso de los partidos. A pesar del resultado, Domínguez lamentó no haber cerrado el partido con anterioridad y quedar a expensas del penalti que terminó fallando Julio Álvarez. "Intentamos marcar más goles, pero no pudo ser", indicó sobre las dificultades que atravesó el conjunto blanquiazul en la segunda mitad.