El Manchester United dejó escapar en Old Trafford el encuentro de la sexta jornada de la liga inglesa ante el Tottenham (2-3) y queda cuatro puntos por detrás del líder de la Premier, el Chelsea.

El belga Jan Vertonghen marcó el primer gol de los visitantes a los dos minutos de juego, mientras que el galés Gareth Bale sumó el segundo para los de André Villas-Boas, que suman tres victorias consecutivas en liga, a la media hora.

Tuvo que salir Wayne Rooney, recuperado de su lesión en el muslo, para revolucionar el encuentro en la segunda parte, pero los goles del portugués Luis Nani, a pase del inglés, y del japonés Shinji Kagawa, no fueron suficientes contra un Tottenham que había marcado el tercero por medio del estadounidense Clint Dempsey.

El United saltó al campo conociendo de antemano el resultado de los blues que hacía imposible que los de Alex Ferguson les arrebataran el liderato de la Premier esta jornada. Algo desconcentrados, los diablos rojos se complicaron la vida nada más comenzar el encuentro. Era la quinta ocasión en seis partidos de liga esta temporada en la que los de Ferguson comenzaban el duelo por detrás en el marcador.

El primer tiempo concluyó con un solo tiro a puerta del United y con Ferguson visiblemente enfadado. Tuvo que salir Wanye Roonie, que reaparecía en liga tras varias semanas de baja por une herida en el muslo, para revolucionar el encuentro al inicio del segundo tiempo. El internacional inglés trazó desde el costado derecho un centro paralelo a la línea de fondo que permitió al portugués Luis Nani meter el pie en el primer palo y tocar el balón lo justo para dejarlo fuera del alcance del guardameta estadounidense Brad Friedel.

Era el primero de los tres goles que vio Old Trafford en apenas dos minutos: el siguiente corrió a cargo del spur Dempsey, que se encontró en el área con el rechace de Lindegaard tras un disparo de Bale y no tuvo más que empujar el balón. Con 3-1 en el marcador, Van Persie fue quien reaccionó apenas treinta segundos después, y coló un balón hasta los pies del japonés Shinji Kagawa, que no falló el gol ante el portero. El partido estaba vivo, pero ya no varió el resultado.