Mireia Belmonte, que pasó a la final de los 800 con el cuarto mejor tiempo, y África Zamorano, semifinalista del 200 espalda con el décimo tiempo, progresaron en las series matinales de los Mundiales de Budapest en las que Jimena Pérez quedó fuera en los 800.

Belmonte nadó en la misma serie que Katie Ledecky, que marcó el mejor tiempo de las series con 8:20.24, por delante de su compatriota Leah Smith (8:21.19). Belmonte marcó 8:24.98 y se sintió muy cómoda.

La cruz en esta prueba fue Jimena Pérez, que nadó en 8:41.41, diez segundos por encima del tiempo que la llevó a Budapest, y fue decimoctava en el total.

"Otra vez tuve problemas a causa de la gripe que tengo, aunque dormí mejor. Pero en cuanto me tiré a la piscina todo fue más rodado y pude acabar bien", dijo Belmonte tras la prueba.

La española, oro en 200 mariposa y plata en el 1500, aspira a una medalla en el 800. "Había que estar delante, veía a la china (Li Bingjie) y supuse que Ledecky iba por delante", comentó.

En la final de los 200 braza, Jessica Vall fue octava pese a nadar 20 centésimas más rápido que en la calificación (2:23.29), en una carrera en la que el oro se lo llevó la rusa Yuliya Efimova.