El Atlético consiguió una valiosa victoria en Ipurua ante el Eibar con un solitario gol de Gameiro, que mantiene al equipo colchonero como mayor perseguidor del líder FC Barcelona, y frenó la gran racha de resultados de un Eibar que se estrelló con Jan Oblak.

Desde el mes de noviembre del pasado año no perdía el equipo de Jose Luis Mendilibar, y su buena racha de siete encuentros sin perder la rompió el Atlético, que supo aguantar las embestidas del conjunto armero gracias a Oblak. El meta esloveno salvó los tres puntos de un cuadro rojiblanco al que le faltó producción ofensiva, echando de menos al sancionado Diego Costa.

En un partido marcado por la lluvia, el Atlético saltó al campo dispuesto a defender su segunda plaza, y seguir siendo la particular bestia negra del Eibar, que no gana desde 2001 al equipo rojiblanco.

El Atlético avisó en los primeros minutos con dos ocasiones de Correa. A medida que pasaban los minutos, el Eibar iba aumentado el ritmo, pero el Atlético no perdió la paciencia y cerca de cumplirse la primera media hora, supo aprovechar una jugada rápida, en la que Griezmann hizo de asistente para dar el pase de la muerte a Kevin Gameiro, quien hizo, a la postre, el único gol del partido.