El verano del Madrid está siendo, como poco, desconcertante para muchos de sus aficionados. Primero fue la dimisión por sorpresa de Zidane como entrenador, luego la marcha de Cristiano Ronaldo al Juventus por poco más de 100 millones de euros y, ahora, los rumores que colocan a Luka Modric en tierras italianas. Pero, quizás, lo más sorprendente sea la respuesta del presidente de la entidad blanca, Florentino Pérez, a toda esta disyuntiva: nada. El creador del modelo de los galácticos parece no estar dispuesto a aceptar las nuevas normas del mercado impuesto por equipos como Manchester City y PSG. A falta de grandes estrellas con las que llenar el Bernabéu, el Madrid lo fía todo -de momento- a una serie de jóvenes jugadores, promesas más que realidades, que están cuajando buenas actuaciones en pretemporada y que están siendo los motivos de ilusión para los seguidores blancos.
El capitán general del baby Madrid es Marco Asensio. El mallorquín, con 22 años, es el jugador más experimentado, lleva en el Madrid dos temporadas más una anterior ya en Primera con el Espanyol. Es en el que más esperanzas tienen puestas en el Paseo de la Castellana. Ya internacional por España, a Asensio se le pide que muestre su talento de manera más regular. Sin Ronaldo, la banda izquierda del once de Lopetegui tiene una vacante a la que Asensio debe opositar.
Tras él, hay toda una serie de proyectos a jugador que necesitan tiempo para seguir formándose, un tiempo que quizás en el exigente Madrid no tengan. El brasileño Vinicius es, de momento y con 18 años recién cumplidos, el fichaje estrella del verano madridista. Con unas cualidades innatas para el uno contra uno, Vinicius mostró destellos tanto contra el United como contra el Juventus, disparando la imaginación de los madridistas respecto a lo que pueda aportar el joven extremo a partir de esta misma campaña.
Sin embargo, en el Madrid siguen pidiendo calma y, a pesar de haber costado alrededor de 40 millones, está inscrito como jugador del juvenil A y no tiene dorsal del primer equipo. Otros jóvenes con menos focos encima, pero que también están demostrando tener potencial para triunfar en el Madrid, son el guardameta ucraniano de 19 años, Andriy Lunin, que sigue sin conceder un gol en pretemporada; la sempiterna promesa Martin Odegaard o los mirlos Fede Valverde, Javi Sánchez y Sergio Reguilón, este último, la gran sorpresa de la pretemporada blanca y serio candidato a ser el suplente de Marcelo en el lateral izquierdo esta próxima temporada.
De todos modos, estas buenas sensaciones deben confirmarlas en los momentos importantes de la temporada y ver si se han ganado la confianza de Lopetegui para ponerlos sobre el césped en partidos de verdad. La primera prueba, la Supercopa ante el Atlético.
