El Viaxes Amarelle estuvo cerca de dar la sorpresa y puntuar en el partido que le enfrentó ayer en la Sagrada Familia al Poio Pescamar, un equipo de la zona alta de la clasificación contra el que luchó de tú a tú. Le llegó a empatar hasta en dos ocasiones, se tuvo que reponer de las lesiones de dos de sus jugadores. No había manera de que las coruñesas bajaran los brazos y solo lo hicieron en el último minuto, cuando un gol de Daniela acabó con sus esperanzas de puntuar en el duelo que había sido aplazado y que correspondía a la tercera jornada.
Fue un partido muy disputado y equilibrado. Pero a las locales les tocó remar siempre a la contra. Primero porque tras serles anulado un gol, encajaron acto seguido el 0-1. Un golpe del que se repusieron con la respuesta de Iraia, que hizo el 1-1. De nuevo tuvieron que remontar después de que Jenny pusiese el 1-2 en el marcador. Y otra vez el Amarelle igualó, esta vez por medio de María Gómez. Con el 2-2 se llegó al descanso. En la segunda parte, las lesiones de Irune e Iraia lastraron las rotaciones de las naranjas y el Poio apretó para buscar la victoria. El Amarelle se defendió bien, pero no aguantó hasta el final. Le faltó solo un minuto.
