El Deportivo Liceo afronta esta tarde un partido intrascendente contra el Forte dei Marmi en la última jornada de la Liga Europea (Riazor, 19.00). Lo que se presentaba como una final se quedó en un trámite después de que los verdiblancos quedaran eliminados antes de tiempo. Le llega, además, en un momento de la temporada en la que el conjunto dirigido por Juan Copa está muy justo de fuerzas, con dos meses con continuos contratiempos en forma de lesiones y sanciones, por lo que las querrá reservar para el martes. Los coruñeses visitan al Noia con la defensa de la segunda plaza de la OK Liga en juego. La derrota inesperada contra el Vic dejó tanto a los de Sant Sadurní como al Reus a solo cuatro puntos, por lo que el Liceo no quiere que se acerquen más y espera puntuar para evitar que esto ocurra.

El equipo verdiblanco esperaba que el partido contra el Forte fuera una final. Después de caer en Portugal, las cuentas salían siempre que los italianos perdieran contra el Sporting. Si esto sucedía así, se jugarían la segunda posición del grupo en A Coruña, con desventaja para los locales que tenían que remontar los tres goles de su visita a la Toscana. Pero el empate sin goles entre italianos y portugueses en la pasada jornada frustró todos los planes de los liceístas. Eliminados antes de tiempo. Sin excusas para su entrenador.

Por eso ahora el duelo de esta tarde parece intrascendente. El técnico se centra más en recuperar a todos sus efectivos para viajar a Noia. Josep Lamas podrá jugar, ya que la sanción de siete partidos le afecta en la liga. Marc Coy apura su recuperación. También Martín Payero podría estar de vuelta de su paso por Angola para jugar con su selección. El que no podrá estar en este encuentro será Eduard Lamas, que continúa lesionado.