Dos goles en los últimos minutos, uno de Luis Suárez en el minuto 85 y otro de Leo Messi en el 86, le dieron prácticamente el título de Liga al Barça después de derrotar por 2-0 al Atlético de Madrid, que jugó 62 minutos con uno menos por la expulsión de Diego Costa y que resistió casi hasta el final gracias a la extraordinaria actuación de Oblak.

Un triunfo que sirve a los de Ernesto Valverde para poner la directa hacia su octavo campeonato doméstico en los últimos once años. Ahora el Barça tiene once puntos de ventaja, más la diferencia de goles con el Atlético (segundo clasificado), con siete partidos por jugarse.

El tanto de Luis Suárez, en el 85, fue decisivo. El uruguayo, con una magnífica rosca, batió a Oblak, que hasta entonces había mantenido vivo a su equipo. En la siguiente jugada, Messi cerró el partido y prácticamente el campeonato en una acción individual.

Por una vez que el planteamiento de Diego Simeone parecía valiente en el Camp Nou, la incontinencia verbal de Diego Costa puso fin a las aspiraciones atléticas. Hasta entonces, no es que los colchoneros tuvieran el control del juego, pero sí que mostraron un plan con la idea de plantar cara al rival.