Es una temporada atípica para el Liceo. Si ya la comenzó con una plantilla corta, por la salida de César Carballeira que no fue suplida, Juan Copa nunca se podría haber imaginado todos los contratiempos, en forma de lesiones y sanciones, con los que se iba a ir encontrando. Tantos, que ha necesitado tirar de 18 jugadores diferentes para ir completando las convocatorias, algunas auténticos ejercicios de malabarismos entre su equipo y el filial. Porque diez de ellos pertenecen a este. O por lo menos de inicio iban a formar parte de él y por las circunstancias tuvieron que ir saltando de arriba a abajo. A los ocho fijos (Xavi Malián y Martín Rodríguez en la portería y Eduard Lamas, Sergi Miras, Marc Coy, David Torres, Josep Lamas y Carlo di Benedetto) se les han unido Martín Payero, Facundo Bridge, Fabrizio Ciocale, Adrián Candamio, Mikel Abeal, Pablo Parga, Dani López y tres porteros: Dani Menéndez, Diego García y el júnior Jesús Mon.