Carles Grau fue uno de los grandes protagonistas de la primera semifinal de la final a cuatro de la Liga Europea que se está disputando en Lisboa. El guardameta del Porto, que la temporada que viene defenderá las redes del Liceo, selló su portería en la tanda de penaltis después de que tras el tiempo reglamentario el partido terminase con empate a uno. Ningún jugador del Barça consiguió batirle desde la pena máxima, lo que hizo bueno el único acierto de Helder Nunes. Paradójicamente, el portugués fue el verdugo del equipo cuya camiseta defenderá el curso que viene.

El rival del Porto en la final de hoy (19.00 horas) será el anfitrión Sporting de Portugal, que se impuso en la otra semifinal en el derbi lisboeta al Benfica por 5-4. En el conjunto local, uno de los verdugos del Liceo en la primera fase de esta temporada, juegan los exjugadores del Liceo Toni Pérez y Henrique Magalhães.