El alemán Pascal Ackermann (BORA-Hansgrohe) se impuso ayer en la quinta etapa del Giro de Italia, disputada entre Frascati y Terracina sobre 140 kilómetros, en una jornada corta pero pasada por agua en la que el velocista hizo su doblete particular con llegada limpia y sin cambios en una general liderada por Primoz Roglic (Jumbo-Visma). Ackermann se vio cerrado inicialmente cuando tenía el esprint lanzado y perseguía a Fernando Gaviria, pero cuando encontró vía libre, tiró de fuerza de pedal para volver a ganar.