El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) impuso una multa de 301 euros al Mallorca por la entrada al campo de un espontáneo durante el duelo del sábado ante el Barcelona en Son Moix y apercibió al conjunto azulgrana por retrasar su salida al terreno de juego en ese mismo encuentro de la vigésima octava jornada de LaLiga.

El comité presidido por Carmen Pérez entiende de la aparición de un espontáneo en el minuto 53 del partido entre bermellones y blaugranas supone una "alteración del orden del encuentro de carácter leve", por lo que impone al club una sanción de 301 euros. Al Barcelona, que según el acta accedió cuatro minutos tarde al césped, le recuerda lo estricto de los protocolos.