El Barcelona volvió a recuperar la sonrisa y a Ansu Fati antes de viajar a Lisboa y ponerse de nuevo a prueba en la Liga de Campeones. Y lo hizo a costa de un flojo Levante, al que doblegó con facilidad (3-0) en un partido que tuvo varias buenas noticias en clave azulgrana.

La primera, el regreso de Ansu, que reapareció diez meses después de su lesión, con el 10 de Messi a la espalda, para animar el choque en los últimos minutos y cerrar la cuenta goleadora del Barça. Y la segunda, el gran partido de Nico y Gavi, dos futbolistas en edad juvenil que evidenciaron con su talento y tremenda personalidad que, a falta de un presente brillante, este equipo tiene al menos, un futuro esperanzador.

A vueltas con el sistema, Koeman apostó esta vez por un 4-2-3-1 de inicio, con Nico como escudero de Sergio Busquets en el doble pivote. Pero fue un acción diabólica de Memphis por banda izquierda quien forzaba un penalti a los cinco minutos que el propio punta neerlandés convertía en el 1-0.

El Levante, que no conoce la victoria en la liga esta temporada y que nunca ha ganado el Camp Nou, fue el rival idóneo para que este Barça recuperara un poco de su autoestima.

Dominador de la posesión, el equipo azulgrana se aplicaba bien en la recuperación tras pérdida y mantenía, con su presión alta, al conjunto de Paco López lejos de su área.

En una rápida transición, Dest, también desde la izquierda, habilitaba a Luuk de Jong para que batiese a Aitor desde la frontal y estrenase su cuenta goleadora como azulgrana antes del cuarto de hora.

También la tuvo Piqué, que llegó a rematar forzado en el segundo palo un centro de Memphis; Gavi, en una vaselina que no pudo superar a Aitor, y el propio Memphis en un cabezazo envenenado que el meta del Levante desvió a córner poco antes del descanso.

El Barça se marchaba al entreacto con buenas sensaciones y una imagen mejorada respecto a partidos anteriores. Y el choque continuó plácido para la escuadra local tras la reanudación.

Memphis tuvo otras dos ocasiones para ampliar la ventaja azulgrana, pero se encontró con Aitor. Y Nico golpeó desviado desde la frontal. El Levante ni se acercaba a la meta de Ter Stegen y el público del Camp Nou empezó a reclamar la presencia de Ansu Fati, que ya calentaba en la banda.

Cuando el hispano-guineano salió para jugar los últimos diez minutos, el estadio rugió dispuesto a vibrar con cada aparición de su nuevo ídolo.

Entonces llegaría el momento de Ansu Fati, que ya había avisado en una jugada por la izquierda nada más entrar en el campo y en otra acción marca de la casa en la que reclamó penalti de Pablo Martínez que el árbitro no señaló. A la tercera, el joven canterano recuperó el balón en una contra y batió a Aitor con un disparo raso.

Ansu Fati reaparece con gol 10 meses después

El delantero del Barcelona Ansu Fati apuntó que no tiene “presión” por llevar el 10 a la espalda ni por la expectación con su regreso tras una larga lesión, el cual se produjo ayer ante el Levante con un gran gol en diez minutos sobre el césped. “Jugamos en casa, siempre tenemos que ganar, feliz por la victoria, nos queda mucho por recorrer aún, agradecer a los doctores y fisios que han estado conmigo durante este proceso y a la afición”, afirmó. El joven atacante azulgrana volvió 10 meses después de una grave lesión que parecía no tener fin y lo hizo con un gol que celebró a lo grande en el 3-0 en el Camp Nou ya en el descuento. “Por ayudar al equipo, por mi familia que ha sufrido estos meses y la gente del club, estoy muy agradecido a todos, han sido el gran apoyo”, dijo. “Yo soy uno más, intentaré sumar en lo que pueda y cuando el míster me dé oportunidad de jugar estaré disponible para poder ayudar. Depende de cómo me vaya encontrando y los minutos que tenga que tendré que ganármelos, a seguir trabajando, somos el Barça, tenemos que pelear”, añadió el delantero.