En el minuto 92 en Palermo, en su segundo tiro de todo el partido, con un fenomenal derechazo lejano de Trajkovski, Macedonia del Norte expulsó a Italia de la ruta hacia el Mundial de Qatar 2022 (0-1), en un batacazo estruendoso de la Azzurra, por segunda vez consecutiva fuera del torneo de los torneos, en contraste con la exhibición de Gareth Bale con Gales (2-1), la victoria de Portugal, asustada, pero vencedora 3-1 ante Turquía, y el triunfo de Suecia ante República Checa en la prórroga (1-0).

En cuatro ocasiones campeona del planeta, la más reciente en 2006, Italia no participó en Rusia en 2018 ni lo hará en Qatar en 2022. Jamás en su historia se quedó fuera de dos Mundiales consecutivos. Es más, en toda su historia, sólo no había jugado dos Mundiales antes de 2018. Un dato que da la dimensión del fiasco del conjunto italiano, cuya ofensiva se estrelló una y otra vez con la resistencia macedonia, que, de repente, sin intuirlo, regateó hasta la prórroga, con el trallazo de Trajkovski que arruinó a Italia y provocó la gesta de Macedonia cuando el partido se dirigía invariablemente hacia el tiempo extra.

El gol, junto al poste, incontestable, lo celebró todo el equipo dentro del césped, conscientes de la hazaña histórica que esto supone, entre el gesto de incredulidad de Roberto Mancini, seleccionador de Italia, y de todo su equipo, con algunos de sus jugadores noqueados sobre el terreno por un 0-1 impensable, pero demoledor. “Es difícil de explicar, hay una gran decepción, estamos destrozados”, admitió Giorgio Chiellini.

Macedonia del Norte desafía ahora a Portugal en terreno luso. Al calor de su público en Do Dragao, Cristiano y sus compañeros superaron a Turquía (3-1). Nada más necesitaron 41 minutos para imponer los pronósticos, aunque después sufrieron para conservar su victoria.

El 2-0 entonces era una demostración indudable de la selección lusa, sin João Félix —suplente por muy esplendoroso que sea su momento actual en el Atlético de Madrid, luego entró en el minuto 71— y con Cristiano Ronaldo, aunque su equipo no requirió los goles de su estrella para derribar a su adversario con una celeridad que finalmente fue más aparente que otra cosa.

Porque, aunque al cuarto de hora un tiro al poste de Bernardo Silva abrió la ruta del 1-0 a Otavio, raudo para alcanzar el rechace del palo y transformarlo en mucho más, y un cabezazo certero de Diogo Jota pareció sofocar la reacción de su rival y sentenciar el partido en el minuto 41, Turquía se rebeló contra tal diferencia con el 2-1 de Burak Yilmaz que sostuvo la emoción y puso contra las cuerdas al bloque de Cristiano Ronaldo hasta tal punto que el delantero turco tuvo un penalti en el 85 para forzar la prórroga. Lo lanzó a las nubes. Y todo Portugal suspiró de alivio, más aún con el 3-1 en el tiempo añadido de Matheus.

Dotado de una calidad indiscutible, cuando Gareth Bale juega con su selección es un líder incontestable para Gales, que solventó este jueves su duelo ante Austria con un magnífico doblete de su estrella, rumbo a una de las tres finales de la repesca europea por el Mundial 2022.