La selección española dio una lección de orgullo a la temible Lituania en los octavos de final del Europeo, que vio como un equipo en construcción liderado por el base nacionalizado Lorenzo Brown —autor de 28 puntos y 8 asistencias— sellaba en la prórroga la clasificación para cuartos.En un Mercedes-Benz Arena de Berlín con mayoría de seguidores lituanos, España demostró ser un grupo granítico, fuerte mentalmente y, sobre todo, muy solidario.
A ello se sumó el magistral planteamiento táctico del seleccionador español, Sergio Scariolo, que anuló a Jonas Valanciunas (5 puntos y 6 rebotes).
Lorenzo Brown, autor de 12 puntos en el tiempo extra, secundado por Willy Hernangómez (21 puntos y 8 rebotes) en la zona, apareció para acabar con un equipo lituano que llegaba al partido como favorito.
Consciente de la superioridad de los lituanos en la pintura, Scariolo planteó un encuentro físico y táctico, alternando defensas zonales que incomodaran al dúo Valanciunas-Sabonis, las dos torres del conjunto báltico.
Le salió bien la jugada en el primer cuarto. En el segundo acto, España tuvo su momento y no lo aprovechó. En la reanudación, los jugadores de Kazys Maksvytis salieron al parqué con algo más de gasolina e ideas en ataque aunque el partido llegaba vivo al último acto (63-68).
La defensa española apareció en el momento de la verdad. Lituania cayó en la telaraña y España, con un mejorado Lorenzo Brown ataque se presentó al último minutos con ventaja, Brazdeikis apareció con un palmeó sobre la bocina para forzar la prórroga (83-83).
En el tiempo extra, Brown se exhibió con puntos y asistencias, a pesar del empeño de Brazdeikis en mantener viva la llama de la esperanza para los lituanos.
