La propuesta de convenio del Deportivo supone en total un ahorro de cinco millones respecto de la de Hacienda, según el presidente del club coruñés, Augusto César Lendoiro, que presentó ayer a los medios de comunicación un informe económico detallado de ambos planes. La propuesta del Deportivo supondría un pago de 126 millones fraccionado en 34 años, mientras que la de Hacienda se eleva a 131 millones que tendrían que abonarse en 10 años, aunque concentra el grueso de la amortización en los ocho primeros años.

La explicación de que el plan del Deportivo suponga globalmente una cantidad menor a pagar, pese a que la quita propuesta por el club coruñés es inferior a la planteada por Hacienda -un 33% frente a un 45%- radica en el impuesto de la propia quita y los intereses de la deuda. La quita, en cualquiera de los casos, se considera fiscalmente un ingreso y está sujeta a un impuesto del 33% que retorna a Hacienda. En el caso del plan de Hacienda, la quita del 45% sería de 27 millones, pero debe pagar 9 millones de impuesto, lo que deja la quita real en 18 millones. A esto hay que sumarle los intereses de la deuda (2%), que ascienden a casi 10 millones. El 2% de los intereses está calculado sobre la estancia en Primera, ya que si el Deportivo no asciende pronto, su viabilidad con el plan de Hacienda es nula, puesto que supone la liquidación del club coruñés si no asciende en dos temporadas.

Los 19 millones que suman el impuesto de la quita y los intereses de la deuda lastran el resultado del plan de Hacienda frente al del Deportivo, que solo debe restar 6,6 millones de impuesto por los 20 millones de quita del 33% y no contempla el pago de intereses por la deuda. "La quita no es tanta quita como la gente piensa, lleva un impuesto de sociedades del 33%, lo que supone que se acorta bastante. Cuanta más alta es la quita, mayor es el impuesto. Y esto no lo refleja Hacienda en su propuesta", señala Lendoiro.

Al beneficio neto de pagar finalmente 5 millones menos que el plan de Hacienda, la propuesta del Deportivo añade la viabilidad de ese pago, ya que tiene dos años de carencia, es decir, que no empezaría a pagar la deuda hasta 2017 y los plazos son mucho más asequibles. Para hacerse una idea, al tercer año del convenio, en 2017, la propuesta del Deportivo supone un pago de 3 millones, mientras que la de la Agencia Tributaria obliga a abonar 13,3 millones (lo que sería imposible si está en Segunda, donde los ingresos son de 14 millones, y le abocaría a la liquidación).

"El convenio de Hacienda es imposible de cumplir. Independientemente de que al frente del club esté Lendoiro o cualquier otra persona. Al quinto año, tendríamos que haber pagado 48 millones más de lo que propone el Dépor y eso es imposible. La única solución es ampliar os años de convenio para alcanzar el objetivo", asegura el presidente del Deportivo.

Para evitar precisamente marcar una cantidad fija anual de pago de la deuda, que podría ser inasumible según militase el club en Segunda o Primera, el plan del Deportivo dedica el 20% de cada presupuesto a la amortización del débito. Como todo plan de convenio, el club está obligado a hacer una previsión de los presupuestos que manejaría en los 17 años de vigencia del acuerdo. El Deportivo concentra los menores presupuestos en los cuatro primeros años, en los que tiene dos de carencia, con el objeto de consolidar un proyecto en Primera. Este plan económico cuenta ya con el respaldo oficial de la Liga y la AFE, tras ser analizado por los técnicos de ambos organismos, y tiene bastantes posibilidades de ser aceptado también por los bancos, lo que dejaría sola a Hacienda en su pulso contra el club. En cualquier caso, bastante más de la tercera parte de la deuda con Hacienda -unos 35 millones-, la ordinaria y la subordinada, quedaría obligada por el convenio, lo que rebaja considerablemente el peso de la Agencia Tributaria en las negociaciones. El plan del Deportivo contempla la inmediata devolución a Hacienda de 12 millones y otros 9 a los bancos de la deuda privilegiada, correspondientes a los derechos televisivos de Mediapro embargados.

"Los acreedores ordinarios y los bancos se dan cuenta de que el plan de Hacienda es imposible. Estamos cerrando esfuerzos para cerrar acuerdos con todos. Existen soluciones con los acreedores ordinarios y están encaminados con los bancos, solo pendientes de firma. Ahora falta reunirnos y debatirlo con Hacienda. Hay que recordarle que, con mucha menos deuda privilegiada, concedió al Celta 11 años para pagarla. Esperamos conseguir el apoyo de Hacienda, porque es básico. Hemos solicitado ya una reunión con Hacienda para hablar de todo esto", afirmó Lendoiro.