El Deportivo regresará el lunes a los entrenamientos con la incógnita de saber cómo evolucionará Lucas Pérez del tratamiento en la rodilla izquierda que le mantiene parado desde finales de octubre. Desde que el día 26 de ese mes, en el partido contra el Espanyol disputado en el estadio de Cornellá, el delantero coruñés tuviera que abandonar el partido antes de cumplirse el cuarto de hora por una contusión en la rodilla no ha vuelto a ejercitarse con el resto de sus compañeros. Su situación es paradigmática dentro del rosario de lesiones que ha padecido la plantilla deportivista desde el comienzo del campeonato.
El técnico, Víctor Fernández, ha tenido disponible al grupo al completo en muy contadas ocasiones por los percances físicos que se han sucedido prácticamente desde que se inició la pretemporada. Solo ante el Valencia, precisamente en el partido en el que los blanquiazules lograron su mejor resultado, el entrenador tuvo a su disposición a casi todos los jugadores y pudo disponer de alternativas en el once.
Lucas Pérez se ha convertido en la ausencia más lamentada por el técnico desde que los problemas físicos se cebaran con el coruñés prácticamente desde su aterrizaje en el equipo. Unas molestias musculares le impidieron efectuar la pretemporada al mismo ritmo que el resto de sus compañeros y su posterior problema en la rodilla le ha mantenido fuera de las convocatorias desde octubre. Pero Víctor Fernández tampoco ha podido disponer con regularidad de otros jugadores a los que reservaba un papel protagonista en las alineaciones.
El entrenador deportivista no ha ocultado casi nunca que Luis Fariña tendría un papel destacado en sus planes. La rodilla renqueante del argentino, sin embargo, le ha pasado factura en este primer tramo del campeonato. El centrocampista se ha visto obligado a disputar algunos partidos infiltrado por los médicos y recientemente se perdió varios partidos debido a una lesión en el muslo. En su regreso ante el Elche marcó el gol de la victoria y salvó el pellejo de Víctor Fernández, quien volvió a glosar la importancia del argentino y la necesidad de que encuentre continuidad en su juego.
Lucas Pérez y Luis Fariña han sido los más perjudicados por las lesiones esta temporada, pero otros compañeros tampoco se han salvado de los problemas físicos. La gira programada por Sudamérica al comienzo de la pretemporada pasó factura a más de uno debido a la falta de rodaje que todavía evidenciaban los futbolistas de la plantilla por aquel entonces. Germán Lux tuvo que regresar a los pocos días de haber volado a Colombia debido a una dolencia muscular en la pierna derecha y después era Isaac Cuenca el que se veía obligado a volver también por unas molestias musculares.
Esa pretemporada accidentada -Manuel Pablo tampoco se libró de la enfermería- fue el preludio de lo que vendría después cuando se inició la competición. Entremedias algunos futbolistas debieron continuar con el proceso de recuperación de dolencias pasadas. Wilk comenzó trabajando al margen para dejar atrás un problema heredado del final de la temporada pasada y Diogo Salomão reapareció hace escasos días tras superar la grave lesión de rodilla que sufrió hace nueve meses.
La enfermería deportivista está actualmente prácticamente vacía. Solo Lucas Pérez se mantiene fuera del grupo, pero hubo momentos en los que convivieron varios futbolistas. Pablo Insua inauguró el rosario de lesiones con un esguince que se agravó tras verse obligado a disputar el partido frente al Rayo Vallecano en Riazor. Víctor Fernández no contaba por entonces con un relevo en el centro de la defensa y el canterano tuvo que disputar el encuentro físicamente mermado. Estuvo prácticamente un mes fuera de los terrenos de juego.
El siguiente golpe importante llegaría con la lesión de Juan Domínguez tan solo un día antes del derbi ante el Celta. Una rotura muscular le mantuvo también un mes sin poder jugar. Desde entonces, sus apariciones en el once han sido intermitentes, alternando la titularidad con la suplencia.
Tampoco se han librado de los problemas físicos Hélder Postiga, que se perdió dos partidos por un problema muscular, y Canella, al que distintos percances han obligado a trabajar en solitario estos meses. También Insua volvería a quedarse fuera de nuevo dentro de esta particular plaga de lesiones que se ha convertido en un gran lastre para los deportivistas.
