Las dos últimas incorporaciones deportivistas, Florin Andone y Carles Gil, se entrenaron ayer por primera vez junto a sus nuevos compañeros. Ambos participaron con normalidad en la sesión con la que la plantilla retomó el trabajo en la ciudad deportiva después de la concentración de la semana pasada en Uruguay. Andone trabajó por la tarde a menor ritmo.

Ninguno de los dos pudo viajar a Montevideo debido a que sus fichajes se cerraron ya con el equipo en el país sudamericano, por lo que la primera toma de contacto con el vestuario no se produjo hasta ayer.

Los dos se integraron en el grupo a las órdenes de Gaizka Garitano, que ya dispone de una plantilla prácticamente perfilada después de las llegadas del delantero rumano y del jugador de banda. A estas alturas, con más de tres semanas por delante para el inicio de la competición, el club busca un jugador con el que completar el ataque.

El centrocampista Celso Borges destacó el esfuerzo del club para avanzar la plantilla con adelanto respecto al inicio de la competición. "Se ha hecho un grandísimo trabajo con eso. Hay muchos tipos distintos de jugadores que se mezclan muy bien. Eso abre el abanico para el entrenador", destacó. "El hecho de aumentar la competencia dentro del equipo va a dar buen ritmo a todos. Poco a poco vamos dándole forma", añadió Borges.