"Hay que aparcar las diferencias e ir todos a una"

- ¿La línea será continuista?

-La idea es darle continuidad a todo lo que se hizo bien y también creemos que hay muchas cosas que podemos mejorar y así lo vamos a hacer. Dentro en un mes habrá una asamblea extraordinaria para presentar nuestras propuestas y esperemos que las peñas hagan las suyas.

- ¿Cuáles son esos matices que pretende introducir?

-Preferiría que las peñas sean las primeras en enterarse en esa próxima asamblea. No tenemos ningún problema en que la gente los conozca, pero los primeros interesados tienen que ser los propios peñistas.

- ¿Uno de los principales objetivos es volver a unir a todo el deportivismo?

-Es que hay algo que nos une a todos, y es que por encima de todo está el Dépor, independientemente de que nos gusten unas cosas o no. Si el Dépor va bien, el resto va a ir bien. Entre todos tenemos que poner nuestro granito de arena e intentar todas las partes aparcar las diferencias que podamos tener e ir todos a una, porque al final lo que todos queremos es llevar al Dépor donde se merece, que es a la Primera División otra vez.

- ¿Cómo calificaría la relación actual entre equipo, consejo de administración y afición?

-Hay que tener claro que llevamos unos años muy complicados en el tema deportivo y es normal que la gente esté enfadada. Nos fuimos salvando en temporadas pasadas pero este último año trágicamente hemos descendido. En el tema de la relación con el consejo, habrá quién le guste y quién no, pero todos tenemos que estar por encima de que nos guste un consejo o no, o la directiva de la Federación de Peñas o no. Al final, lo que todos queremos es que el Dépor esté donde se merece y todos tenemos que poner de nuestra parte para que eso sea así.

- ¿Hay sintonía entre la Federación de Peñas y el consejo?

-Siempre tuvimos buena relación con ellos, como no podía ser de otra manera. La Federación de Peñas tiene que ir de la mano del Dépor, y viceversa. Está claro que habrá cosas en las que no estemos de acuerdo y así se lo haremos ver. Y al revés, también. Cuando ellos vean que algo no les guste cómo lo hacemos, pues que lo expresen con total normalidad, como lo vamos a hacer nosotros. Cuando haya cosas que creamos que están mal hechas, se lo diremos con total normalidad, educación y respeto, como fue hasta ahora por ambas partes.

- ¿Qué es lo que se puede mejorar por parte del club en su relación con la Federación de Peñas?

-Creo que tenemos que tener entre todos más reuniones de trabajo. Sí que tuvimos con Gelines Romero, la persona del club encargada de las relaciones con las peñas, pero sí que nos gustaría tener una relación más directa con el consejo de administración. A raíz de esta última temporada lo hemos empezado a hacer, hemos tenido más reuniones, y ese es el camino para un buen entendimiento entre ambas partes.

- El club empezó la campaña de abonados muy pronto y hasta ahora ha despachado algo más de 9.000 carnés. ¿Cree que el número de socios acabará siendo similar al de las últimas temporadas?

-Este año la campaña empezó un mes antes de lo normal y la gente terminó muy enfadada la Liga pasada. El equipo no estuvo a la altura de sus aficionados. La gente va a ir renovando poco a poco. No sé si llegaremos a los números de los últimos años, pero a medida que se acerque el inicio de la temporada se van a ir incrementando. Al final, los que estamos siempre ahí no vamos a fallar. Podemos renovar antes o después, pero la gente que quiere al Dépor va a estar en las buenas, y más en las malas. No me cabe duda de que también va a haber un buen número de socios este año.

- ¿Cómo valora esa bajada del 5% en el precio de los abonos?

-Puedo dar mi opinión a nivel personal y creo que para bajarlos en ese porcentaje, yo no los hubiera bajado. Dejándolos como estaban la gente hubiera renovado igual porque, sinceramente, un 5% no influye para renovar o no. Sí que es cierto que la rebaja fue poca. Para hacer una rebaja así, los hubiera dejado como estaban. Si es para colaborar en que haya un mejor equipo, bienvenido sea.

- Gane o pierda el Dépor, ¿lo que van a exigir siempre es que el equipo lo dé todo para que la afición se vuelva a sentir orgullosa después de varios años seguidos de decepciones?

-Exactamente. El año pasado tuve una reunión en Abegondo con uno de los capitanes y lo único que le hacía ver es que cuando una persona lo da todo no hay nada que reprochar. Puedes ganar o perder, pero cuando ves que un jugador se vacía y defiende a su gente, poco le puedes decir. Cuando eso no pasa así y ves que realmente no sudan la camiseta o hay muchas cuestiones extradeportivas, ahí es cuando vienen los problemas. Son profesionales y tienen que darse cuenta de dónde están, en un club grande, no en un club cualquiera. Nosotros, mientras lo den todo por esta camiseta, y muestren entrega y pundonor, los vamos a apoyar, como no podía ser de otra manera. La afición del Dépor no ha fallado nunca. En estos últimos años las plantillas no han estado a la altura, por unas serie de circunstancias, y lo único salvable ha sido la afición, que está por encima de todo.

- ¿Qué le parece la plantilla que se está armando?

-Es complicado opinar sobre el tema. Está claro que no están llegando nombres pero es algo que ya dijo Carmelo (Del Pozo). Una de las cosas que me está transmitiendo mucha confianza es el nuevo director deportivo. Es un proyecto nuevo y sabemos que la Segunda es una competición larga y dura. Hay que tener paciencia y esperar a que los futbolistas se acoplen. Tenemos que darle un margen de confianza a los jugadores.

- ¿En Segunda los rivales tienen que notar más la presión de jugar en un estadio como Riazor?

-Creo que este año es el más importante de los últimos cuatro. Es muy difícil ascender. Por masa social somos uno de los equipos, por no decir el equipo que en teoría tendría que estar lo más arriba posible. Pero hay muchos clubes en Segunda con grandes estadios y grandes aficiones. Hay que intentar ir a ganar a cada campo y que Riazor sea una caldera. Y luego, en los desplazamientos, tratar de llevar la máxima gente posible para que también se sientan arropados.