José Antonio Gordillo, hace un año técnico analista del Deportivo en la etapa de Pepe Mel, llegó en mayo al banquillo del Nàstic tras un breve paso por el Levante dentro del staff encabezado por Paco López. El sevillano regresaba así al club catalán, en el que fue jugador durante cinco temporadas (1998-2003) y luego secretario técnico en 2010. Su 4-4-2 es inamovible, como el rombo de Natxo González en el Dépor. "Desde el primer día nos dijo que quería jugar con dos puntas y el equipo está armado para eso", argumenta David Rocha. "Quiere un Nàstic atrevido con balón, pero compacto, con dos líneas de cuatro muy juntitas, y que sepa sufrir", explica.