Natxo González no se esconde. El entrenador deportivista es consciente de que el equipo ha bajado su rendimiento y de que sus prestaciones no son las mismas que hace un mes. Entiende sin embargo el técnico que forma parte de un proceso natural en una temporada y que su tarea es regresar a una línea ascendente. "Siempre hay una evolución, luego momentos en que parece un estancamiento, incluso un bajón, y creo que es natural, porque no es una progresión constante. Por tanto, quizás ahora mismo, dentro de las 19 jornadas ha ocurrido algo. No sé si es estancarte, si un retroceso, pero hemos encajado más de lo normal y hemos perdido cierta fiabilidad", reflexionó ayer tras el entrenamiento.

Natxo no oculta que detrás del discreto rendimiento del mes de diciembre (cinco puntos de doce posibles) hay un motivo relacionado con el funcionamiento colectivo del equipo, a la vez relacionado con el bajón individual de algunos futbolistas. "Hay algo que nos hace pensar que no es nuestro mejor momento, pero lo vemos de una forma muy natural, porque esto era previsible y lo que tenemos que conseguir es que esos momentos de estancamiento o retroceso se noten lo menos posible", insistió el técnico.

El partido frente al Lugo de esta tarde ofrece así la oportunidad al equipo de recuperar su versión más convincente y al mismo tiempo despejar las dudas que dejó la derrota frente al Cádiz antes del parón navideño. "Siempre es una prueba y un reto. Venimos de una derrota contundente, aunque hace tiempo que ha ocurrido y parece en el olvido", reconoció Natxo.

El técnico deportivista también se detuvo en la situación de Cartabia, con el que charló al final del entrenamiento y al que espera poder dar más continuidad este año. "Queremos que esté mañana, pasado y el otro, algo que no hemos logrado hasta ahora", argumentó Natxo González.