Las quejas de Christian Santos en Abegondo el pasado jueves no pasaron inadvertidas para los integrantes del primer equipo blanquiazul (futbolistas y técnicos), sin embargo el venezolano no creó ningún cisma, al contrario, sus compañeros entienden lo que dijo. Al menos fue lo que transmitió ayer Dani Giménez, uno de los capitanes. El portero destacó la aportación del atacante al vestuario y dijo que él solo quería decir "aquí estoy" cuando se quejó por su situación tanto por los minutos que le dan en el terreno de juego como por sentirse casi ninguneado en la plantilla.

"Sus declaraciones no nos han parecido mal porque luego lo ves en el trabajo diario y te da explicaciones y yo creo que Christian solo quería decir: 'aquí estoy", señaló. El portero advirtió de que "no hay nadie tóxico en el vestuario" y confesó que Santos "es uno de esos jugadores que hace lo posible" por fomentar la unión y, en este sentido, aportó al juegos como una mesa de tenis de mesa y una diana de dardos.

"Parecen tonterías, pero ayuda a que haya unión en el equipo", argumentó el cancerbero, quien precisó que "quizás" Santos "se expresó un poco mal" a la hora de hablar de su situación. "Más que reivindicar un puesto en el equipo, reivindicaba que está preparado y puede ser protagonista, nada más. Podía haberse explicado un poquillo mejor", añadió. También aclaró que el delantero "matizó un poquillo las palabras" en el vestuario tanto con sus compañeros como con el entrenador y gente del club.

"Le gustaría jugar más minutos y sabe que aquí (en la sala de prensa) no es la manera de pedirlo, sino más en el campo. Él hace lo posible por jugar pero hay otra gente por delante. Él quería plasmar que está haciendo todo lo posible. A veces frustra un poquillo intentar, intentar, intentar y no estar en el once. El entrenador lo ha entendido súper bien. Christian se ha explicado mejor abajo (en el vestuario)", razonó el guardameta.