El Deportivo Abanca se enfrentó ayer a la gran tortura de esta Primera Iberdrola, la visita al intratable Barcelona, y salió con la cabeza alta, a pesar del 6-1 que refleja el marcador final.

El equipo de Manu Sánchez llegaba con bajas y, de hecho, el técnico alinéo de inicio a Miriam y Patri y reservó en el banquillo a futbolistas como Alba Merino y Athenea, pero aún así supo dar la cara, sobre todo, durante la primera media hora, sin renunciar a sus ideales, a salir jugando desde atrás. Hasta el minuto 22 (solo el Levante aguantó más entre los visitantes esta temporada a la planta trituradora culé) resistió un acoso sin respiro que echó abajo el muro de contención blanquiazul merced a una jugada individual de una soberbia Caroline Graham Hansen, una pesadilla que logó un hat-trick y una asistencia en una jornada en la que la sufrió Nuria y todo el entramado defensivo coruñés. Una vez llegó el 1-0, los tantos se sucedieron cual cascada antes del descanso hasta llegar al 3-0. Llegaron otros tres muy rápido, hasta que se produjo la merecida genialidad de Tere.