Siete jornadas tardó Luis César en dar con la tecla para la mejoría del Dépor, que plasmó sobre el campo el pasado sábado contra el Alcorcón, aunque no el marcador. El cambio de sistema sentó bien al equipo. No encajó y generó ocasiones suficientes para vencer, así que el técnico planea repetir esa fórmula el domingo en el Anxo Carro. En el entrenamiento de ayer en Abegondo volvió a ensayar con un 4-3-3, prácticamente con los mismos jugadores que utilizó en el último partido. Apostará por la continuidad en el dibujo y también en los protagonistas, aunque con algún cambio en el once. Aketxe adelantó su posición en las pruebas de ayer para incrustarse en el tridente ofensivo junto a Mollejo y Koné. La entrada del vasco en lugar de Longo serviría para potenciar el balón parado, decisivo en un campo como el Anxo Carro. También Gaku Shibasaki tiene opciones de entrar, en su caso en el trivote con el que Luis César logró que el Dépor dominara el centro del campo contra el Alcorcón.

El nuevo dibujo sirvió para destapar una mejor versión de varios futbolistas. Uno de ellos, Vicente Gómez, cuya actuación recordó a las que firmó la pasada temporada a las órdenes de Natxo González en sus primeros partidos como blanquiazul. El isleño cree que el 4-3-3 permitió crecer al equipo y considera que "lo más normal" sería no tocar ese dibujo y "seguir en la misma dinámica" el domingo contra el Lugo. "Tras venir de un tiempo que no estábamos bien, esa sensación ha liberado al vestuario y ha saltado un clic en la cabeza de decir que no somos tan malos. Sabemos que si estamos en este nivel de activación y de actitud de querer la pelota, la cosa va a cambiar seguro más pronto que tarde", explicó ayer Vicente en Abegondo.

El Dépor está en una situación dramática, colista de Segunda a cinco puntos de la salvación tras haber sumado solo once en los primeros 17 encuentros. No gana desde la jornada inaugural, así que de nada vale que las sensaciones mejoren. Lo que necesita son triunfos, empezando por la "finalísima" del domingo en Lugo, un choque "vital". La imagen ofrecida contra el Alcorcón demuestra que "hay esperanza, hay luz", pero todo pasa por empezar a sumar ya de tres en tres después del empate del pasado fin de semana. "Por un lado fue importante porque todos fuimos conscientes de que hay esperanza, que hay luz. El equipo estuvo bien. Pero por otro lado, estando bien y siendo superiores, no fuimos capaces de ganar, y lo que nos hacer falta son las victorias. Son importantes las sensaciones pero los puntos son lo que nos está haciendo falta. Todos vimos esperanza, el público también, y nos despidió con aplausos. Vimos que el equipo todavía puede dar un poco más a partir de aquí", añadió el isleño antes del entrenamiento de ayer en Abegondo, donde Luis César afinó la misma tecla que tocó el sábado ante el Alcorcón, la del 4-3-3 con tres pivotes y tres atacantes.