El coronavirus también golpea en Perú, sobre todo en Lima, en donde Beto da Silva cumple la cuarentena en su domicilio, con la única compañía de un amigo. Su salida del Dépor estaba cantada y se concretó en el mercado invernal pese a que Fernando Vázquez lo consideraba un futbolista muy aprovechable. "Me consta. El profe habló conmigo y me lo dijo", asegura el peruano, quien a sus 23 años optó por regresar a su país "para poder avanzar" en su carrera en las filas del Alianza Lima. "Fue algo mutuo, un acuerdo. No me pidieron que me fuese, pero yo sentí que tenía que dar ese paso. Estoy muy feliz, vine a un gran club de mi país, y sé que acá voy a poder encontrar mi mejor nivel. En el Dépor en las pocas actuaciones que tuve creo que lo hice bien, dejé una buena imagen. Eso siempre me lo recuerdan los hinchas y también los mismos compañeros míos „explica el internacional, en contacto con varios blanquiazules como Nolaskoain o Mollejo„. En la etapa que pasé en A Coruña fui muy feliz y siempre le voy a desear lo mejor al Deportivo. Si más adelante se da la oportunidad de volver ahí, creo que me he dejado las puertas abiertas. ¿Por qué no?".

Beto está convencido de que hizo lo correcto al optar por un cambio de rumbo „"era una decisión que había que tomar"„ ante la falta de oportunidades en el Dépor, con el que solo disfrutó de 122 minutos en liga repartidos en siete jornadas, siempre desde el banquillo. "Los entrenadores que tuve ahí „Anquela, Luis César y Vázquez„ siempre han tenido buen concepto de mí pero al final terminaba no teniendo las oportunidades que quizá yo pensaba que merecía o que en algún momento quizá me las había ganado. Me pareció complicado, por un momento no lo entendía, pero cada entrenador tiene sus ideas, sus gustos. Me quedé muy triste de no haber triunfado ahí, porque yo creo que tenía las condiciones. Era un club en el que realmente pensé que iba a quedarme por mucho tiempo, pero así es el fútbol. Ahora sigo mi camino y quizá más adelante se pueda dar".

De momento, trata de destapar su mejor versión en el campeonato peruano, también interrumpido por la crisis del coronavirus, tras haber jugado sus dos primeros partidos con Alianza Lima. Mientras espera a que la liga se reanude, entrena en casa a diario para regresar lo mejor posible, confinado en su domicilio "sin salir para nada". "Esperemos que esto vaya mejorando. Acá no ha llegado al nivel de Italia o España, y espero que no llegue. Tuvimos el ejemplo de Europa y nos dio tiempo a prevenirnos un poco más, pero sí se está expandiendo muy rápido", lamenta Beto, que lanza una reflexión de cara al futuro: "Es una situación nueva para todos. Nadie se esperaba esto. También es algo para que el mundo y las personas se den cuenta de las cosas que realmente importan. Espero que luego que pase todo esto haya un cambio en cada uno de nosotros, sepamos valorar lo que realmente importa y cuidarnos los unos a los otros".