Borja Valle, extremo del Deportivo, ha asegurado este viernes que después del confinamiento por el coronavirus su "forma de ver las cosas ha cambiado" y ha afirmado que, como futbolista, se siente un "privilegiado".

"El confinamiento ha sido una experiencia increíble, me ha ayudado como persona y en lo profesional, a cómo canalizar ciertas sensaciones y ciertos momentos. Me ha ayudado, soy más consciente de lo importante que es el fútbol en mi vida, el privilegio que tengo de vivir lo que vivo", explicó en una rueda de prensa telemática.

Valle, que llevaba once jornadas sin tener protagonismo en el césped hasta que reapareció como suplente en el tercer partido después del parón por la Covid-19, advirtió de que ahora valora "mucho todo" lo que tiene "más allá de jugar o no".

El extremo indicó que esa larga ausencia en los terrenos de juego le produjo "sensaciones encontradas" que, con el confinamiento, ha sabido digerir.

"Antes de la cuarentena seguramente fuera rabia, impotencia, no entender y no querer aceptar, cometer errores incluso a nivel personal. Después de la cuarentena mi vida ha cambiado, mi forma de ver las cosas ha cambiado", dijo.

Valle, que acaba contrato, admitió que "sería una alegría" recibir una propuesta de renovación del Deportivo.

"La temporada se acaba, tu contrato se acaba, y no sabes lo que va a pasar. Es una sensación de tristeza por todo lo que he vivido y ver que se está acabando", indicó.

El extremo admitió que todos hubiesen "pagado dinero" por estar fuera de las posiciones de descenso después de haber sido colistas en la primera vuelta.

"Ahora tenemos cuatro puntos de ventaja sobre el descenso, somos un equipo fiable, con las ideas claras y es súper positivo lo que ha sucedido en esta temporada atípica. Es una ventaja que hubiéramos firmado todos, pero no es nada. Hay que lograr el objetivo", precisó.

El domingo, el Deportivo tendrá enfrente al Huesca, al que Valle consideró "un equipazo" que a su equipo le pasó por encima en la primera vuelta.

"Recuerdo ese partido, una impotencia terrible. A día de hoy aún hablamos en este partido. Es de las veces que más impotencia he sentido en un partido de fútbol. Fue un desastre, nos sentimos desbordados", recordó.