Uno de Coristanco, otro de Bertamiráns, los dos canteranos del Dépor y aspirantes al cetro europeo. La eliminación del Atlético a manos del RB Leipzig ha puesto en el foco a dos jóvenes criados en la cantera del Dépor, que el equipo blanquiazul no pudo retener y que ahora aspiran a ser la gran sorpresa de una de la Champions más atípicas de la historia. Seis años les separan y sus roles son distintos en el conjunto de Nagelsmann, pero les unen sus orígenes a Ángel Tasende y a Hugo Novoa.

"De Coristanco a semis. Manda carallo", exclamaba Angeliño minutos y aún desde el vestuario tras haber dado el pase decisivo del 2-1 que eliminaba al conjunto de Simeone. Ese diminutivo, un nombre impronunciable en Inglaterra, Holanda, Alemania y Estados Unidos, es el apodo que ha acompañado a Ángel Esmorís Tasende (1997) en sus aventuras futbolísticas en todos estos países y también desde sus inicios en las escuelas Luis Calvo de Carballo. De ahí le reclutó el Dépor. Lendoiro siempre sintió predilección por él, le llamaba El Potro. Deslumbró en uno de esos torneos alevines que nacieron al abrigo de Brunete, que en aquella ocasión se disputó en la ciudad deportiva de La Torre, y fue imposible quedárselo. En edad cadete se lo llevó el Manchester City y jugó junto a Lampard y Pirlo en Nueva York, en la segunda española y en Holanda antes de que Guardiola reclamase que ejecutasen la cláusula de recompra ante la amenaza de que se lo llevase el PSG. Este año buscó minutos en Alemania y está siendo uno de los mejores, un pulmón al que la banda se le queda corta. Roza el cielo, pero nunca ha dejado de ser deportivista y anhela jugar de blanquiazul antes de retirarse.

Si Angeliño tiene 23 años y es lateral, Hugo cuenta con 17 y es extremo. Era la gran joya de Abegondo, internacional sub 17, y los alemanes se lo llevaron hace un año con una oferta irrechazable. Firmó por tres temporadas con opción a una cuarta Los primeros meses fueron duros en Alemania. Vivía en la academia, pero su familia se mudó a la misma ciudad para acompañarle. Hace semanas le comunicaron que sería del primer equipo en la 20-21 y su técnico ya se lo quiso llevar a la fase final de la Champions. Un adolescente que acaricia la Copa de Europa.