La primera eliminatoria de la Copa del Rey —teórico escenario para el protagonismo de la segunda unidad, la de los futbolistas secundarios— se convirtió en una prolongación del campeonato liguero después de la desfeita del pasado domingo frente al Celta B. Ganar al CD El Ejido se convirtió de pronto en un objetivo prioritario, así que Fernando Vázquez decidió prescindir de los fabrilistas Adri Castro y Juan Rodríguez, que siguen sin estrenarse con el primer equipo, y optó por formar un once lo más competitivo posible plagado de titularísimos. Entre las escasas novedades destacó la notable actuación bajo palos del debutante Lucho García. Fue una de las pocas buenas noticias que deparó el encuentro de ayer para el Deportivo, más allá del resultado y la clasificación para la siguiente ronda.

El colombiano realizó varias paradas decisivas para mantener el cero en su portería y, con ello, impulsar al equipo coruñés a seguir adelante en la competición. En su primera actuación en partido oficial con el Dépor, Lucho cumplió con nota para demostrar que a la sombra de Carlos Abad hay una competencia importante. El joven guardameta lideró esa exigua segunda unidad que Vázquez utilizó en el torneo del KO. Del once inicial, solo Rui Costa, además del propio Lucho, no había sido nunca titular en el campeonato de Segunda B. Los demás, todos importantes, hasta el punto de que el técnico solo dejó en el banquillo a dos de los fijos en los últimos partidos, Uche Agbo y Diego Rolan.

Al margen de algunos destellos de Lara, que viene de perder protagonismo en las jornadas más recientes, de las novedades solo brilló el portero Lucho. Realizó dos grandes paradas en la primera parte —una espectacular a un disparo a la escuadra de Cova— y en la segunda también evitó que marcara Sergio Pérez. Prometedor debut del joven colombiano.