1-1 | Al Dépor Abanca le entra el vértigo

Las blanquiazules ceden un empate contra el Europa y desperdician el tanto inicial de Ainhoa para acercar el ascenso

A falta de tres jornadas tienen cuatro puntos de ventaja sobre el Espanyol

Marcos Otero

Marcos Otero

Lo tenía en la mano, pero al Dépor Abanca le entró otra vez el vértigo. Un gol de Ainhoa Marín en la segunda mitad después de un partido que se le fue atragantando más y más dejaba el ascenso a un paso, pero de nuevo se arrugó el conjunto blanquiazul, incapaz en el último tramo del partido de sostener una ventaja que le costó un mundo alcanzar después de desperdiciar un carrusel de oportunidades ante un rival que creyó en sí mismo y se llevó un premio imprevisto de Riazor. El tropiezo del Espanyol volvió a colocar al equipo de Irene Ferreras ante una oportunidad de oro, pero volvió a fallar. Igual que hace una semana pasada contra Osasuna.

Una victoria valía medio ascenso para el Dépor Abanca, así que salió con decisión a por el primer gol en un contexto que probablemente ya esperaba. El Europa le cedió la pelota, fiando sus opciones al error de las blanquiazules o a un contragolpe que en la primera parte nunca llegó. La iniciativa tenía que ser del conjunto de Ferreras, que tuvo la primera ocasión a los dos minutos, en un error de la portera visitante en la que Ana de Teresa se entretuvo demasiado. La delantera remataría forzada poco después un centro de Ainhoa Marín y dejó clara la que iba a ser la tónica del partido.

El repliegue intensivo de las barcelonesas dejó muy poco espacio para que el Dépor Abanca armara el juego por dentro. Apareció poco Paula Gutiérrez, así que casi todo el peligro de las deportivistas empezó a concentrarse en las bandas, especialmente en la derecha. Por ahí se volcó Ainhoa, intermitente y sin la chispa que acostumbra en el uno para uno, Lucía Martínez y especialmente Cris Martínez. La lateral derecha se convirtió casi en una interior para dar salida al juego y que aparecieran esos espacios que el Dépor Abanca no encontraba.

Raquel García se lamenta durante el partido.

Raquel García se lamenta durante el partido. / Carlos Pardellas

Millene sumaría una nueva oportunidad al filo del cuarto de hora, pero se resbalaría en el área antes del remate. Para entonces ya estaba claro que las blanquiazules iban a tener que masticar muchísimo el partido. Tuvieron paciencia, pero estuvieron imprecisas, especialmente en el área. A falta de espacios por dentro o de que Paula encontrara una socia, el juego deportivista empezó a concentrarse en las llegadas por la banda. Amenazó poco, porque Millene y ADT estuvieron casi siempre en una especie de limbo: no aparecían en los apoyos por dentro y tampoco tenían presencia en el área.

Al Dépor Abanca le quedaba el recurso del balón parado, que explotaron en una sucesión de saques de esquina que remató Raquel García. En el mejor de ellos, sola al borde del área pequeña, mandó su cabezazo a las manos de la portera rival.

No fue la primera parte deseada para las deportivistas, quizá sí la esperada, pero pudo ser peor porque tras el descanso no arrancaron bien. El Europa se estiró y rozó el tanto en un disparo cruzado de Ramos que se marchó por poco. Respiró el conjunto de Irene Ferreras que siguió sufriendo un calvario para llegar con claridad al área. Tuvo el gol en un error de las visitantes en el inicio de la jugada que aprovechó Millene.

Henar cae derribada por una jugadora del Europa.

Henar cae derribada por una jugadora del Europa. / Carlos Pardellas

La delantera enfiló el área seguida de Ainhoa, superó a la portera y cedió el balón para su compañera con la portería vacía, pero la catalana se resbaló antes de poder rematar. Demasiada mala pata y pasaban los minutos. Necesitaba un gol el Dépor Abanca para que no aparecieran los nervios. Lo encontró en una acción embarullada en el área en la que la defensa del Europa dejó un balón muerto en los pies de Ainhoa. No perdonó la jugadora blanquiazul y puso el partido en un contexto favorable.

Tuvo el segundo ADT en un lanzamiento de falta que estrelló en el larguero, pero aparecieron los fantasmas de un equipo al que en ocasiones le sobra retórica y le falta contundencia. Una jugada aislada mal defendida entre Raquel y Yohana acabó en el tanto del empate de las visitantes. No se descompuso el Dépor Abanca, que se volcó en busca de un tanto que encaminara el ascenso. Tendrá que seguir remando.