Los sindicatos rechazaron ayer la reestructuración planteada por Iberian Partners para su red de producción y distribución de Coca-Cola en España y defendieron la continuidad de las cuatro fábricas que pretende cerrar -las de Asturias, Alicante, Mallorca y Madrid- y de los 1.250 trabajadores -alrededor del 20% de la plantilla- que se verían afectados por el fin de la actividad.

La Federación Agroalimentaria de Comisiones Obreras -independientemente de que los comités de empresa de cada centro establezcan otros actos de presión- ya convocó paros que se celebrarán durante el mes que dura el periodo de consultas del ERE. Para respetar los plazos legales, los paros comenzarán la semana del 3 de febrero y consistirán en dos horas por turno y trabajador (martes y jueves) durante las dos primeras semanas y paros completos (también martes y jueves) en la tercera (y última) semana de negociación de la regulación.

Mientras, UGT anunció que prepara un calendario de movilizaciones con el objetivo de evitar los despidos y los cierres de las cuatro fábricas. A los paros ya concretados por CCOO el sindicato pretende sumar concentraciones y movilizaciones que culminarían con una gran manifestación en Madrid en la última semana de negociación del ERE.