Galicia prevé recaudar 23 millones menos en 2024 por la caída en la venta de pisos

La Xunta advierte de la “evolución negativa” del mercado inmobiliario el próximo año | A esto se sumarán las rebajas en el Impuesto de Transmisiones por importe de 21 millones

Un agente inmobiliario coloca un cartel de ‘Se vende’. |   // NOÉ PARGA

Un agente inmobiliario coloca un cartel de ‘Se vende’. | // NOÉ PARGA / Paula Pérez

Paula Pérez

El bum inmobiliario generado tras la pandemia está ya desinflándose. El encarecimiento de las hipotecas por la subida de los precios de interés está enfriando ya el mercado. Solo entre enero y agosto de este año la compraventa de viviendas cayó un 12%. Y no se espera una recuperación en breve. Al menos así lo cree la Xunta que habla de “atonía” en el sector y prevé “una evolución negativa” durante el año 2024. Esto tendrá un impacto directo en sus cuentas, pues calcula que dejará de recaudar 23,1 millones de euros el próximo ejercicio.

Según recoge el proyecto de Presupuestos, el Gobierno gallego espera ingresar en 2024 un total de 331,4 millones de euros del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que grava la transmisión de bienes de segunda mano, y del de Actos Jurídicos Documentados. Esto supone recaudar 44,7 millones de euros menos que lo previsto para este año 2023.

Esta caída del 12 por ciento se explica por dos razones. Por un lado, la rebaja fiscal anunciada por la Xunta para el próximo año que consistirá en una minoración del impuesto de transmisiones de inmuebles del 9 al 8 por ciento, además de reducir del 8 al 3 por ciento el tipo que grava la venta de vehículos usados y de la eliminación del ITP para la compra de coches cualificados como “cero emisiones”. En conjunto, estos descuentos tendrán un impacto de 21,6 millones de euros.

Pero, además de las rebajas fiscales, el Ejecutivo gallego reconoce que también se reducirá su recaudación debido “a la atonía del sector inmobiliario que ya se está registrando en 2023 y cuyo efecto se mantendrá durante el año 2024 por culpa de una esperada evolución negativa del mercado y de los precios, afectado por el endurecimiento de las condiciones financieras de las hipotecas”. Esto restará otros 23,1 millones a las arcas autonómicas.

A la fuerte subida en el precio de los alquileres, se suma ahora el encarecimiento de las hipotecas que continuará presionando el mercado en 2024, dificultando todavía más el acceso a una vivienda sobre todo por parte de ciertos sectores más vulnerables como jóvenes o personas con escasos recursos.

Y, a su vez, se traducirá en una caída de la recaudación. En todo caso, la merma de ingresos por el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados será una excepción, pues con carácter general los ingresos de la Administración autonómica crecerán el próximo año impulsados por la inflación, la mejora del empleo y el incremento en el consumo de los hogares.

Así, será el IVA el que mayor incremento experimentará en 2024. La Xunta espera que la recaudación de este tributo se eleve un 16,9 por ciento hasta los 2.872 millones, lo que le reportará mayores entregas a cuenta dentro del sistema de financiación autonómica. También aumentarán los ingresos del IRPF un 2 por ciento hasta los 3.187 millones de euros.

En cuanto al Impuesto de Sucesiones y Donaciones el Gobierno gallego lleva años aplicando rebajas fiscales, de manera que el 99 por ciento de los gallegos están exentos de pagar este gravamen. A pesar de ello, su recaudación crecerá ligeramente un 1 por ciento hasta los 178,2 millones de euros. La Consellería de Facenda lo achaca al incremento de donaciones, sobre las que también se aplica este tributo.

Otro impuesto sobre el que la Xunta aplica bonificaciones fiscales es el de Patrimonio, que grava las rentas más altas, y que disfruta de un descuento del 50 por ciento. Esto supondrá un descenso en la recaudación en 2024 del 25,5 por ciento, de manera que las arcas autonómicas solo ingresarán 41 millones de euros de este tributo que grava el patrimonio de los más ricos.

Donde no hay descuentos es el impuesto que se aplica sobre los depósitos de las entidades de crédito creado por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2014. Este tributo le reporta al erario autonómico 25,1 millones de euros.

Al margen de estos impuestos de carácter estatal, la Xunta cuenta también con sus propios gravámenes. En 2020 se creó un canon para aplicar a los inmuebles en estado de abandono. Sin embargo, la recaudación esperada para el próximo año es “cero”. El Gobierno gallego explica que “el proceso regulado en la ley es complejo y largo y en lo que va de año 2023 aún no se ha declarado ningún inmueble en estado de abandono”.

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