Los hosteleros están obligados a tener documentados los litros de aceite usado que entregan a las empresas de reciclaje. Sin embargo son pocas las compañías en la comunidad que hacen factura de los pagos por la retirada del producto destinado a fabricar biodiésel, un negocio que provocó en los últimos años la proliferación de nuevas firmas. Desde la Confederación de Empresarios de la Hostelería de Galicia (Cehosga), su presidente, Héctor Cañete, manifestó ayer su desconocimiento de las inspecciones llevadas a cabo por la Xunta y puso sobre la mesa los problemas con los que se encuentran los propietarios de bares y restaurantes para que las empresas acudan a retirar el aceite usado en sus cocinas. Y por ello reclamó a la Consellería de Medio Ambiente que habilite un servicio autonómico de recogida de aceite. "Nadie dice que tenga que ser gratis pero la Administración tiene que dar facilidades para que se pueda hacer el reciclaje", argumenta Cañete, quien asegura no tener constancia de que haya compañías que pagan hasta 20 euros por un barril de 50 litros de residuos vegetales.

Sobre las prácticas irregulares detectadas en cuatro de las empresas ya inspeccionadas, Cañete censura que los hosteleros tengan que estar pendientes de si la compañía que les recoge el aceite usado tiene la autorización correspondiente. "Es de locos que se nos pida a los hosteleros tengamos que estar pendientes de la documentación", censura el presidente de Cehosga.