La construcción fue durante años la locomotora de la economía española y también de la gallega. Un año antes de que estallase la burbuja inmobiliaria en 2008, el peso del sector en ambas superaba el 10%. En la actualidad, no llega al 6%.

Desde principios de 2015 -la recuperación de la construcción en España llegó unos meses antes-, el sector del ladrillo en Galicia no para de crecer y ya encadena 30 meses al alza. Pese a este tendencia, todavía está muy por debajo de los niveles previos a la crisis y esa mejoría, sin embargo, no va de la mano de un incremento de los puestos de trabajo. Todo lo contrario. Por segundo año, la construcción destruye empleo en la comunidad. Lo hizo en 2016 y también en el primer semestre de 2017, según el último informe Seguimiento e análisis da construcción, publicado por el Instituto Galego de Estatística (IGE).

Entre 2000 y 2007, el empleo creció a una tasa media del 4,1% en Galicia y del 5,3% a nivel nacional. A partir de 2008 se produjeron abruptos descensos hasta 2014. La caída media anual en esos años fue del 10,6% en la comunidad y del 14,3% en España.

El sector del ladrillo en Galicia llegó a dar trabajo a 152.000 personas en los tiempos álgidos del boom inmobiliario. Era finales de 2007 cuando la burbuja estaba a punto de reventar. A partir de ese momento, llegó la crisis y se llevó por delante más de la mitad de los puestos de trabajo. A principios de 2014 se alcanzó la cifra más baja de trabajadores: 65.300.

Mano de obra

Durante 2014 y 2015, la construcción en Galicia volvió a necesitar mano de obra y los contratados aumentaron hasta los 75.300. Pero era un espejismo. Durante los siguientes trimestres el empleo se redujo hasta casi rozar la cifra más baja: 73.400 personas en el primer trimestre de 2016; 71.900 en el segundo; 71.900 en el tercero; 70.200 en el cuarto y 66.200 en el primero de 2017. Solo 900 más que la cifra más baja que se alcanzó durante la época más cruda de la crisis. En el segundo trimestre de 2017, últimos datos del IGE, ha habido un pequeño repunte hasta los 67.900 pero no parece suficiente para que el ejercicio 2017 se cierre por encima de los 71.900 de media que había en 2016. En año y medio se han perdido 7.400 puestos de trabajo, el 10% del total.

Como consecuencia, el incremento de la afiliación a la Seguridad Social en lo que va de año es el más bajo de las 17 comunidades, con un aumento del 0,5%. Destacan la subidas de Baleares, Andalucía, Canarias y Comunidad Valenciana por encima del 8%.

El resto de variables que sirven para medir la salud del sector son positivas. Además de llevar dos años y medio de crecimiento, su peso en el PIB gallego se mantiene y las transacciones inmobiliarias también aumentan.

Los datos positivos reflejan que el sector encadena en la comunidad diez trimestres al alza. Es decir, desde finales de 2014 suma dos años y medio en positivo. El de 2015 lo cerró con una subida del 3,1%, frente al 2,5% de la media nacional. En 2016 acabó con un alza del 3,9% (4,4% en España).

En el primer trimestre de 2017, el incremento fue del 4,5%, una cifra que no se había conseguido en los cuatro anteriores. En el segundo, la subida fue del 3,8%, también por encima de los cuatro de 2016.

Pero este buen comportamiento de los dos últimos ejercicios, al que hay que añadir el primer semestre de 2017, no sirve todavía para contrarrestar el desplome del negocio que se produjo durante la crisis. Por ejemplo, en 2010, 2011 y 2012 hubo caídas por encima del 10%. Desde finales de 2014, el sector vuelve a estar en cifras positivas, pero todavía continúa en niveles de 2001. Un poco peor está la media nacional ya que su actividad es semejante a la de hace 16 años.

Las buenas cifras de los últimos meses han permitido que el peso de la construcción dentro del PIB gallego también haya aumentado. En el primer trimestre de 2017 alcanzó el 6,03%, la mejor cifra de los últimos 14 trimestres. Desde septiembre de 2013 no llegaba a este porcentaje. Sin embargo, y al igual que sucede con el crecimiento del sector, su peso en el PIB de la comunidad también se encuentra lejos de la época de bonanza y es casi la mitad del 11,1% que representaba en 2008. En España es el 5,1% (10,1% en 2008).

Además del crecimiento del sector y del PIB, otra de las variables que está funcionando es la compraventa de viviendas. En los siete primeros meses de este año se realizaron 8.245 operaciones en la comunidad, un 2,3% más que en el mismo periodo del año pasado.

Y la construcción de viviendas continúa con la recuperación, aunque aún es muy leve. Durante el primer semestre de 2017 se construyeron 565 viviendas, una cifra que rompe con tres ejercicios consecutivos a la baja, aunque todavía supone un 97,7% menos que en el mismo periodo de 2007 cuando fueron 25.486. Es decir, el volumen de construcción en Galicia hace una década era 45 veces superior al de la actualidad.