Una reclamación salarial "inasumible" por la Xunta, una contraoferta insuficiente para el comité de huelga, personal de Xustiza acampado en Santiago, abogados y procuradores al límite, juzgados colapsados, más de 21.000 juicios suspendidos y miles de trámites judiciales que se amontonan en los órganos judiciales gallegos. Son las consecuencias de la huelga indefinida iniciada por los funcionarios de Justicia el pasado 7 de febrero y que ha puesto patas arriba los tribunales de la comunidad. Los consumidores cargan contra el Gobierno gallego por no resolver un conflicto que ya suma 79 días de parálisis en los juzgados de la comunidad. La Asociación Galega de Consumidores e Usuarios (Acouga) reprocha a la Xunta que no haya puesto "todos los medios" para poner fin a la huelga. "Existe una evidente proximidad entre las demandas de los empleados públicos de Justicia, por medio de sus representantes sindicales, y las propuestas de la Xunta", advierten desde Acouga.

El colectivo de consumidores acusa a la Administración autonómica de "parecer" más interesada "en culpar a los propios trabajadores de la situación generada y someterlos por agotamiento" que en "hacer un esfuerzo real y definitivo para solucionar el conflicto de modo inmediato". Además, pone entredicho que no se recurriere a la Mediación ni del Consello de Relacións Laborais ni del Consello da Avogacía de Galicia. La Xunta, según cuestionan, muestra una estrategia "más dirigida a vencer que a convencer, a ganar lo que ellos creen un pulso que a resolver la agobiante situación de la Justicia en Galicia y acabar con las injustas condiciones laborales y retribuciones de sus propios empleados".

Tras la ruptura de las negociaciones de manera abrupta el miércoles de la semana pasada, funcionarios de Xustiza iniciaron una acampada ante la sede administrativa de la Xunta hasta concluir la protesta. Los sindicatos Alternativas na Xustiza-CUT, STAJ y CIG propusieron ayer que las negociaciones entre el comité de huelga de los funcionarios de la Administración de Justicia, del que forman parte, y los representantes de la Xunta se retomen mañana. En una rueda de prensa convocada en el autodenominado Campamento Justicia, los sindicalistas defendieron la "unidad de acción" en la defensa de la última propuesta planteada por el comité en una reunión con el Gobierno gallego.

Enrique Araújo (STAJ) ha anunciado que los tres sindicatos presentes proponen un encuentro mañana a las 10 horas en San Caetano. "Queremos una reunión en la que se ponga fin al conflicto. No estamos dispuestos a esperar otras tres semanas, estamos muy cerca y queremos que se acabe", continuó.

Óscar Freixedo (CIG) detalló que la última propuesta de los representantes de la Xunta "no cumple para nada las expectativas" que plantearon los sindicatos cuando convocaron la huelga.

Pablo Valeiras (CUT) acusó al vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, de estar "alargando un conflicto de manera artificial", por lo que pide su dimisión y que vuelvan las negociaciones.

En el pleno de ayer, los diputados del PP rechazaron recurrir "a la mediación y arbitraje" del Consello Galego de Relacións Laborais con el fin de desbloquear la huelga. La iniciativa, que impulsó el BNG y posteriormente se completó con una enmienda del PSdeG, también incluía la petición de "cumplir el acuerdo unánime" alcanzado en su día en la Cámara en relación a las condiciones laborales de este colectivo "manteniendo el diálogo permanente con el comité de huelga hasta que se restablezca el servicio".