Aunque los gallegos siguen mirando el bolsillo a la hora de hacer la compra no son los que más escatiman en gasto en llenar el carro en el supermercado. Galicia es conocida por los turistas por un lugar que visitar, entre otras cosas, por su gastronomía y a los gallegos también les gusta comer bien. Esos hábitos se reflejan en las estadísticas sobre gasto anual por habitante en alimentos y bebidas, que en base a los datos de 2016 sitúan a Galicia como la tercera comunidad en la que más dinero se destina a la alimentación. Cada gallego gasta de media al año 1.601 euros, una cifra que solo superan País Vasco y Asturias, con 1.660 y 1.678 euros respectivamente. El estudio Alimentación en España elaborado por Mercasa, sostiene que durante el año 2016 cada gallego gastó más de 1.600 euros en comida, lo que supone casi un 5% más que en el resto de España.

Entre los productos preferidos que más dinero se llevan en el tique de la compra destacan los chocolates y cacaos, el aceite, el pan y el pescado, que superan la media de consumo nacional. Por el contrario, el nivel de gasto es menor que en el conjunto del país en el caso de los platos preparados, agua mineral, cervezas y zumos. Carne, pescado, frutas y hortalizas frescas, derivados lácteos, pan y bollería, pastelería, galletas y cereales cuentan con la mayor participación sobre el gasto total en la cesta de la compra. Destacan la carne, que supone un 20% del cómputo global, y el pescado, que representan el 15%.

En cuanto al consumo y tomando de nuevo como referencia la media nacional, en Galicia se consume una mayor cantidad de aceite, pescado, pan, leche y frutas frescas, mientras que la cantidad es menor que la cifra estatal en lo que se refiere a la ingesta de platos preparados, frutas y hortalizas transformadas, refrescos y gaseosas, hortalizas frescas y derivados lácteos.

En términos medios, en 2016 cada gallego consumió 125 huevos, 109,2 kilos de frutas frescas, 56,4 kilos de hortalizas, 52 kilos de carne, 43,2 kilos de pan, 35,4 kilos de derivados lácteos, 32 kilos de pescado, 7,4 kilos de platos preparados, 86,3 litros de leche, 43,3 litros de agua embotellada, 39,1 litros de refrescos, 10,8 litros de aceite y 12,2 litros de cerveza. Galicia destaca como la comunidad que más kilos de pescado y más litros de aceite consume anualmente.

Los analistas consideran que uno de los factores que juegan a favor de esta alegría en el gasto alimentario es la abundancia de establecimientos especializados, que van desde la tienda tradicional hasta las grandes superficies repartidas por la geografía regional.

En el suelo gallego se asientan un total de 6.336 locales comerciales especializados en alimentación. Entre ellos hay casi 1.400 supermercados y 39 hipermercados. La provincia de A Coruña concentra el 40%, Pontevedra el 35% y Lugo y Ourense representan casi el 12% en cada caso.

En contraste con el declive del pequeño comercio de alimentación, destacan los 3.030 mercados al aire libre, un 7,4% sobre el total nacional, con buenos ejemplos en localidades como Betanzos; el de Salgueiriños, en Santiago; el de A Pedra, en Vigo, entre otros, que también siguen teniendo una gran importancia en las ventas de productos, sobre todo en el caso de las verduras y las hortalizas.

La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos matiza que "no parece existir correlación entre mayor producción local de alimentos y mayor consumo". Un caso llamativo es el de Andalucía, principal productora de aceite de oliva y una de las autonomías que menos ventas registra.

Al lado de los datos que avalan un repunte del consumo crece la preocupación por el creciente desperdicio alimentario. La Federación Española de Industria de la Alimentación y Bebidas (FIAB) considera imprescindible la colaboración de todos los agentes sociales junto con la Administración para reducir la cantidad de comida que acaba en el cubo de la basura. La entidad recomienda un "consumo responsable dentro del hogar", donde se produce la mayoría del desperdicio.