Un turismo que se da a la fuga tras atropellar a un peatón, un ciclista arrollado por un conductor que lo abandona en medio de la calzada, una colisión entre dos vehículos sin seguro? La lista de los partes por accidentes de tráfico que tiene asumir el Consorcio de Compensación de Seguros es larga y su desembolso en los últimos diez años ronda los 898 millones de euros en toda España, de ellos 55,48 millones en siniestros ocurridos en la red viaria gallega. El grueso del desembolso que recae en este organismo dependiente del Ministerio de Economía es para hacer frente a las facturas que dejan vehículos sin seguro, robados o de conductores fugados, que se llevan el 75% de los fondos que salen de las arcas del Consorcio para accidentes viarios.

En la última década, las carreteras gallegas fueron escenario de un total de 6.641 siniestros provocados por vehículos sin póliza -de los más de 134.000 registrados en toda España, lo que supone el 5% del conjunto del país- y que ocasionaron daños valorados en más de 32 millones de euros -el balance nacional supera los 465,7 millones-. A estas cifras hay que añadir 505 accidentes en Galicia provocados por conductores a la fuga entre 2008 y 2017 -17.849 en España-, cuyas indemnizaciones en la comunidad superaron los 8,9 millones -casi 215,5 millones en todo el territorio nacional-. En resumen, el Estado se dejó en diez años 40,9 millones en los más de 7.000 accidentes causados por vehículos sin seguro y conductores que se dieron a la fuga en las carreteras gallegas. Así lo recoge el informe presentado ayer en A Coruña por el director de Operaciones del Consorcio de Compensación de Seguros, Alejandro Izuzquiza, y el director de la Fundación Inade, Adolfo Campos.

Tendencia a la baja

Las cifras que maneja en la actualidad el organismo estatal están muy por debajo de las alcanzadas en plena crisis debido a las trabas que entonces ponían las compañías aseguradoras y que dejaron fuera a miles de conductores de riesgo que tuvieron que recurrir al Consorcio. El coste de las indemnizaciones por accidentes de tráfico en Galicia asumidas por el Consorcio en 2008 superaban los 8,7 millones -importe máximo de la última década- hasta caer a los 3,18 millones contabilizados en año pasado, casi tres veces menos.

En su función de Fondo de Garantía, el Consorcio es el encargado de indemnizar además de por sus vehículos asegurados -de particulares no captados por compañías privadas y de organismos públicos- por accidentes causados por vehículos desconocidos, sin póliza, robados o asegurados en entidades españolas en liquidación por insolvencia. El año pasado, la entidad aseguradora estatal se hizo cargo de un total de 636 accidentes ocurridos en Galicia que derivaron en 3,1 millones de euros en indemnizaciones. Los partes por siniestros de coches sin póliza (392) dejaron daños por valor de 2,6 millones y los causados por conductores a la fuga (29) superaron los 263.000 euros, un balance que representa la mitad de los siniestros de este tipo que los que atendía el Consorcio hace diez años.

Del total de partes procedentes de Galicia, Pontevedra es la provincia peor parada en las estadísticas del Consorcio. Las indemnizaciones por siniestros protagonizados durante la última década por conductores pontevedreses superan los 25,4 millones de euros, el 46% del total en Galicia.

Le siguen en la tabla los accidentes en los que se ven implicados automovilistas de A Coruña, con 19,32 millones en daños costeados por el Estado, el 35% de la comunidad. Y cierran el balance autonómico con cifras muy alejadas las facturas de accidentes viarios ocurridos en las provincias de Lugo (6,9 millones, el 12%) y Ourense (3,7 millones, el 7%).

Si se tienen en cuenta tan solo los siniestros ocasionados por vehículos sin seguro en Galicia, el coste medio que asume el Consorcio supera los 4.800 euros, un 40% más que el desembolso en el conjunto del país -3.475 euros-. Las tablas de siniestralidad de conductores sin póliza en la comunidad sitúan también a Pontevedra y A Coruña, por este orden, como las provincias con mayor importe de los daños costeados por el Estado -14,3 y 12,05 millones, respectivamente en la última década-.

En cuanto a los siniestros causados por vehículos a la fuga, el desembolso medio en Galicia supera los 17.600 euros, un 46% más que en el conjunto del país (poco más de 12.000). En este tipo de accidentes, el importe global de las indemnizaciones es muy similar en Pontevedra (2,8 millones desde 2008), A Coruña (2,79 millones) y Lugo (2,63). Muy por debajo de estas cifras están los partes que llegaron al Consorcio de automovilistas de Ourense que huyeron tras verse implicados en un accidente, con poco más de 581.00 euros en daños durante la última década.