Los montes gallegos estarán más protegidos este año. Contarán con más recursos humanos y materiales. Los contratos de los agentes forestales serán por cuatro meses y estarán todas las plazas cubiertas durante el periodo de alto riesgo. Más de la mitad de la superficie de Galicia estará controlada por 88 cámaras operativas las 24 horas al día -por ahora están activas 20, el resto lo harán en el plazo de un mes- con el objetivo e disuadir y detectar incendios forestales. Al primer helicóptero infrarrojos que sobrevolará este verano los bosques de la comunidad, se sumarán nuevas motobombas para combatir las llamas. La Consellería do Medio Rural acaba de firmar un contrato de suministro de 11 motobombas que se incorporarán a los diferentes distritos gallegos. El importe de la contratación asciende a 2,3 millones de euros.

Los vehículos cuentan con una bomba de agua para la extinción e incluyen diferentes mejoras en el equipamiento, como el montaje de un cabrestrante de accionamiento hidráulico integrado en la defensa delantera con dos mandos de manejo, capaz de ejercer una fuerza de tracción de ocho toneladas en tiro directo. También incorporan 200 litros de aumento da capacidad de agua de la cisterna sobre los 4.000 litros de capacidad útil que indicaba el pliego de prescripciones técnicas.

La contratación de estas motobombas está cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Desde el año 2009, según apuntan desde el departamento que dirige Ángeles Vázquez, se han renovado 55 motobombas para los distritos forestales y 42 para los municipios de Galicia. En total, hay unas 360 integradas en el Plan de prevención e defensa contra os incendios forestais de Galicia (Pladiga), de las que 158 son de los distritos y el resto de ayuntamientos, parques comarcales y municipales.

Este anuncio se produce después de que este martes Medio Rural explicase que 20 de las 88 cámaras con las que la Xunta vigilará el monte gallego para disuadir a los incendiarios, pero también para detectar fuegos y favorecer una mejor coordinación de los medios de extinción, están ya operativas.

También esta misma semana tuvo lugar en la base General Morillo de Pontevedra la presentación de la Operación Centinela Gallego 2018, con la que las Fuerzas Armadas colaboran cada año en la prevención y lucha contra los incendios forestales en la comunidad.