El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, trasladó ayer a CEOE y a los sindicatos CCOO y UGT que no peligra el contrato de España con Arabia Saudí para venderle cinco corbetas por un importe de 1.800 millones de euros, fabricadas por la empresa pública Navantia. La mayor parte de la construcción se ejecutaría en las instalaciones de Cádiz, aunque algunos de los componentes de las corbetas serían suministrados por los astilleros de la ría de Ferrol.

La semana pasada los sindicatos alertaron de la posibilidad de que Arabia Saudí hubiera paralizado la compra de corbetas a España después de que el Ministerio de Defensa anunciara que se estaba replanteando la venta de 400 bombas al país ante la sospecha de que fueran a utilizarse contra población civil en la guerra de Yemen. En este sentido, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, sostuvo que, según les trasladó el Gobierno, las corbetas "no están en riesgo", por lo que ha querido transmitirles un mensaje de "tranquilidad".

En su comparecencia ayer en el Senado, la ministra de Defensa, Margarita Robles, garantizó que el Gobierno "no dejará en la estacada" a Navantia. Los trabajadores de los astilleros de San Fernando de Cádiz anunciaron movilizaciones porque desconfían del Ejecutivo, mientras que los de Ferrol estaban a la espera de esta comparecencia para decidir si salían a la calle si la ministra no daba "una respuesta positiva".