La mejoría económica, los ajustes en las arcas municipales y el incremento de la presión fiscal han provocado que se reduzca el número de ayuntamientos gallegos que cerraron sus presupuestos de 2018 en negativo, es decir con más gastos que ingresos. Si en 2014 fueron 76 y en 2016, 82, en 2018 esa cifra se redujo hasta los 63, según la liquidación de presupuestos de las administraciones locales del año pasado que acaba de publicar el Ministerio de Hacienda.

Pese al descenso, el volumen de concellos con un saldo negativo en sus cuentas representa el 22% del conjunto de la comunidad, pero se eleva al 25% si se tienen en cuenta los que informaron de su situación económica. O dicho de otra forma, uno de cada cuatro municipios que presentaron los datos a Hacienda no lograron equilibrar sus cuentas y gastaron más de lo que ingresaron.

Los datos que acaba de publicar el ministerio también revelan que el año pasado 189 ayuntamientos gallegos (de los 252 que mandaron a Hacienda los informes de sus liquidaciones presupuestarias) equilibraron sus cuentas e incluso las cerraron en positivo al cierre del ejercicio. Pero hubo otros 63 municipios -13 en la provincia de A Coruña; 22 en la de Lugo; 22 en la de Ourense y 12 en la de Pontevedra- que terminaron 2018 con más gastos que ingresos. En porcentajes, el 23% del total de los concellos de las provincias de Lugo y Ourense tuvieron un desequilibrio presupuestario; el 19% de los de Pontevedra y solo el 14% de los de A Coruña.

Uno de cada cinco consistorios gallegos -a falta de los datos de 69 ayuntamientos que todavía no han enviado los datos a Hacienda- no lograron ceñirse a sus cuentas y gastaron más de lo que ingresaron durante el año pasado. En el primer lugar aparece el Concello de Ferrol con un desvió de 2,2 millones. Le sigue el de Vigo, con 2,1 millones; A Coruña, 1,8 millones; y Salvaterra de Miño (1 millón).

Por debajo del millón de euros de diferencia entre lo que ingresaron y gastaron están Chantada (más de 834.000 euros), Mondoñedo (915.912), A Guarda (844.467) y Muxía (815.234). Los 63 concellos que cerraron el ejercicio en rojo acumularon un saldo negativo de algo más de 19 millones.

De las siete ciudades, salvo Santiago y Ourense que no aparecen en el listado elaborado por Hacienda porque aún no han enviado los datos, tres (A Coruña, Ferrol y Vigo) cerraron en negativo y dos (Lugo y Pontevedra) lo hicieron en positivo. Destaca la cifra de la ciudad lucense que lidera la clasificación de los 189 que tuvieron más ingresos que gastos con 19,1 millones de superavit. En Pontevedra fueron 5,1 millones. También destaca Oleiros que fue el segundo municipio con un resultado positivo mayor: 5,1 millones. Carballo, Narón, Arteixo y Cambre también están entre los 10 primeros con unas cuentas positivas por encima de los dos millones.