La situación provocada por el Covid-19 ha obligado a muchos negocios gallegos a cambiar el rumbo para mantener a flote su actividad con las estrictas medidas sanitarias vigentes. Algunos establecimientos de ocio nocturno ( pubs y discotecas) han comenzado a solicitar en Galicia cambios en sus licencias para mudar su actividad a la de café-bar. Esta opción les permite al menos mantener las puertas abiertas y captar otro tipo de clientela.

La posibilidad de cambiar la licencia viene allanada por la Lei de Emprendedores de Galicia. En uno de sus artículos prevé el procedimiento, para el que es necesario presentar una declaración, un pequeño proyecto y un certificado de accesibilidad y seguridad, además de cumplir con las normativas municipales específicas.

De copas a cafés

En algunos concellos hasta un 20% de los establecimientos de ocio nocturno han tramitado ya el cambio de licencia ante la imposibilidad de continuar con su actividad más allá de la 01:00 de la madrugada. La modifiación no impide que, una vez superada la pandemia, los propietarios de los establecimientos puedan regresar a su antigua actividad. Eso sí, tienen que ceñirse a las normativas que se fijan en la nueva licencia, como son horarios de apertura y cierre, tamaño o condiciones de las instalaciones. Además, según el caso, el cambio en la licencia de actividad puede suponer diferencias a la baja en recibos como el del servicio de basuras.

Uno de los hosteleros gallegos que ha pedido el cambio en su licencia es Dritan Bezati, un empresario cambadés que reconoce que "no nos queda otra que centrarnos en otro tipo de clientela, pasar de servir copas a cafés porque cerrar a la 01:00 haría inviable el negocio". Durante los meses de mayo a julio, el local que regenta en la localidad arousana funcionó "muy bien en horario nocturno gracias a las terrazas y al buen tiempo, pero el horario de cierre y la prohibición de fumar en las terrazas hace imposible que podamos continuar así".

El hostelero cree que el cambio que ya ha solicitado en su licencia "es beneficioso y probablemente lo mantenga en el futuro porque para cerrar a la 01:00 de la madrugada no valía la pena abrir las puertas, perderíamos dinero". El testimonio de Bezati refleja la incertidumbre que atraviesa uno de los sectores más afectados por la crisis del Covid. Los establecimientos que van a salir más perjudicados con esta situación, no obstante, serán los que cuentan con una licencia de café-concierto, impedidos por sus requisitos para poder celebrar muchas actividades en el horario permitido.