Una convocatoria de huelga amenaza con colapsar las oficinas policiales y, en consecuencia, dejar en el aire la renovación de miles de DNI, pasaportes y tarjetas de ciudadanos extranjeros. El sindicato Comisiones Obreras ha convocado paros parciales a partir del 5 de marzo en oficinas de la Policía por la vulneración de los derechos del personal no policial que provoca una pérdida de la calidad de los servicios públicos, especialmente en la expedición del DNI y pasaporte y en extranjería.

Salvo que se desconvoquen a última hora, el primer viernes del próximo mes comenzarán los paros en muchos de los 1.500 puestos de renovación de DNI y pasaporte que hay en el territorio nacional, además de las oficinas de Extranjería. La intención del sindicato es prorrogar estos paros durante los viernes de al menos dos meses. De no haberse llegado a un acuerdo el 30 de abril, el sindicato anuncia que se convocarán jornadas completas de huelga.

Los paros serán de dos doras, entre el 5 de marzo y el 30 de abril, pero CCOO advierte de que si es necesario convocará jornadas completas a partir de esa fecha, “hasta que se garantice el respeto a los derechos del personal no policial”.

El objetivo es exigir la cobertura del total de vacantes, una interlocución efectiva con el Ministerio del Interior y el cumplimiento de los acuerdos en materia de movilidad, prevención de riesgos y reclasificación de puestos de trabajo, entre otros, según informó la central sindical en un comunicado.

“Llevamos años denunciando que, a pesar de la evidente necesidad, el Ministerio del Interior no cubre el total de plazas vacantes del personal no policial”, lamenta Fernando García, secretario general de CCOO en el Ministerio del Interior. Esto hace que quienes gestionan los recursos humanos coloquen a policías en esos puestos, “en detrimento de otros servicios públicos, como la seguridad ciudadana, que entendemos están más cerca del interés, formación y vocación del personal policial, con un importante sobrecoste”, denuncia.

Ya en 2014 el sindicato anticipó el colapso que iba a producirse en los servicios de DNI al coincidir un pico de renovaciones en 2016 y tuvo como respuesta dos ofertas de empleo público extraordinarias, un incremento de 280 puestos “claramente insuficientes cuando hay alrededor de 1.500 vacantes por cubrir”.

CCOO exige, además, una interlocución fluida con el Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía y propone la creación de un órgano de gestión de recursos humanos de personal no policial, determinando las funciones de cada colectivo dentro de la Policía, informa Efe.