Cada vez ingresan menos y cada vez pagan más. En esta eterna problemática viven los productores de leche. En Galicia, 6.540 ganaderos viven del sector. Y según datos del Observatorio de la Cadena Alimentaria del Ministerio de Agricultura, la producción de cada litro cuesta entre 35 y 36 céntimos. Pero por él solamente se paga un precio de 32 céntimos. Los últimos costes se estimaron además en el pasado julio, antes de la subida desatada en los últimos meses, por lo que actualmente serían superiores. Ante este panorama, los ganaderos avisan con futuras protestas. Así lo advertían ayer el Sindicato Labrego Galego (SLG) y la Federación Rural Galega (Fruga), que ya han iniciado reuniones preparatorias por la provincia de Lugo.
Las movilizaciones obedecerían “a los costes disparatados que provocan que se produzca a pérdidas”. Según anticipaba el coordinador de Sectores Ganaderos de Fruga, Elías Somoza, el 2 de noviembre se celebrará un encuentro con productores en Guitiriz “ante la crisis de precios agravada por el notable aumento de los costes”. Además, el Sindicato Labrego Galego solicitará a la Consellería de Medio Rural la convocatoria urgente de la Mesa de la Leche. Afirma que “las granjas gallegas pierden 10 millones de euros cada año por no cubrir esos costes de producción”.
Después de Galicia, Asturias es la otra gran productora láctea de España con 1.476 ganaderos. Pese al liderazgo gallego, desde SLG recalcan que “no se nos paga la leche como en la media estatal ni se apunta una mejora en los próximos meses”. En toda España, viven del sector 11.687 productores que perciben una media de 34 céntimos por litro.
Según Elías Somoza (Fruga), “está claro que tiene que haber un repunte de los precios para procurar la supervivencia de la mayor parte de las explotaciones lácteas gallegas”. Como recuerda la secretaria xeral del Sindicato Labrego Galego, Isabel Villalba, “el Ministerio de Agricultura reconoce que los costes de producción son superiores, y a eso se añade que sube la electricidad, o parámetros muy importantes como la alimentación y el combustible”. Villalba concluye que “el precio está estancado a la baja, se produce de forma artificial porque la distribución ha comenzado a subir los productos que vende”.
Los ganaderos prevén un empeoramiento de la situación a partir de enero de 2022, cuando se vuelve a estipular el precio de los insumos que se negocian anual mente —como los cereales o la propia electricidad—.
Más de 300 granjas desaparecidas en un año
Entre agosto de 2020 y agosto de 2021, desaparecieron en Galicia un total de 317 granjas. Según el Sindicato Labrego Galego, “es el resultado del desprecio absoluto por el sector mostrado tanto por las instituciones políticas como por las industrias y grandes superficies comerciales”. En cuanto a las propuestas para la Política Agraria Común 2023 (PAC), que negocian Consellería de Medio Rural y Ministerio de Agricultura, “son un absoluto despropósito y otro desprecio, nada se ajusta a nuestra realidad”. Calculan desde el SLG que “la nueva reforma de la PAC nos dejará otra vez entre las comunidades con los pagos más pequeños por persona activa agraria, y con el mayor numero de personas agricultoras a título principal que no la cobran”.
