El esperado AVE Galicia-Madrid pondrá en funcionamiento sus trenes comerciales el 21 de este mes. Pero un día antes se celebrará el viaje inaugural, con el presidente del Gobierno y la ministra de Transportes a bordo. Pedro Sánchez y Raquel Sánchez probarán esa alta velocidad antes que el resto de los mortales. Las ganas de realizar ese viaje se demuestra en las ventas anticipadas, con 60.222 billetes vendidos en la primera jornada de comercialización: el pasado 23 de noviembre. Sin embargo, crecen las protestas de los usuarios diarios de los Avant de Renfe que enlazan A Coruña, Santiago y Ourense.

Los servicios ordinarios de esta línea se adaptarán para la llegada del AVE, lo que implica un “adelanto de horarios”. Como indicaron los afectados en un reportaje el sábado en este diario, “ se elimina el tren que salía a las 06.30 de A Coruña con dirección a Ourense”. Y los pasajeros solo tendrán dos servicios a las 05.00 y a las 05.55 para llegar a tiempo a sus trabajos en Ourense, “ya que no hay otro hasta las 08.00”. Al respecto, Renfe afirma que aumentan las frecuencias. Pero recalca que la reconfiguración de horarios es “una práctica habitual por la compañía —no solo ahora por la llegada del AVE— y se hace pensando siempre en las necesidades de la mayoría de los clientes”.

Admite la compañía que los usuarios “tienen derecho a manifestar su disconformidad con ciertas decisiones y desde Renfe se está siempre estudiando la planificación que más conviene a la mayoría de los viajeros y está abierta a futuros ajustes, si así se estima en dicha parrilla horaria”.