El Gobierno gallego invertirá en el próximo año 2023 cinco millones de euros para aumentar la superficie ocupada por el castaño e impulsar la recuperación de los sotos gallegos, a través de la Axencia Galega de Industria Forestal, dependiente de la Consellería do Medio Rural.

Así lo ha explicado el conselleiro de Medio Rural, José González, en el acto de presentación del proyecto tecnológico para la valorización sostenible de la madera de las masas de frondosas caducifolias de Galicia, en el que la Axencia Galega de Industria Forestal invierte 730.000 euros.

En concreto, serán 3,8 millones de euros los que irán destinados a ayudas para nuevas plantaciones y para la restauración de sotos tradicionales, mientras que otro millón irá dirigido a acciones modelo de mejora de soto a través de convenios con asociaciones de gestión conjunta.

La iniciativa presentada este miércoles, que se centrará en especies como el roble o el castaño, servirá de base técnica para la elaboración del Plan Gallego de valorización sostenible de la madera de frondosas caducifolias, que se prevé realizar en el primer trimestre del 2025.

El proyecto tecnológico recoge hasta una docena de acciones diferentes para incidir en el aprovechamiento de masas de pequeño porte y baja calidad, de forma que, a través de operaciones silvícolas, "estas se conviertan en masas con madera de alta calidad".

Nuevas plantaciones

Además, para seguir dándole ánimo al sector, la Xunta de Galicia prevé invertir hasta 23 millones de euros que se repartirán entre 2023 y 2024 para promover nuevas plantaciones de castaño, acciones silvícolas de prevención, primas de mantenimiento y la restauración de sotos entre otras.

Asimismo, se habilitarán nuevas líneas de ayuda, con un importe de 11 millones de euros, para inversión en tecnología forestal, procesamiento, movilización y comercialización de productos forestales.

El titular de Medio Rural ha recordado además que, en el marco del Plan Forestal 2021-2040 y más específicamente del Programa Estratégico de castaño y de la producción de castaña, se persigue recuperar 8.000 hectáreas de sotos y plantar 16.000 hectáreas nuevas, enmarcadas en las 425.000 hectáreas ocupadas por las frondosas que se pretenden alcanzar en un marco de 20 años.

En este mismo sentido, esperan que la superficie de frondosas, objeto de la gestión activa mediante tratamientos silvícolas, se incremente hasta 20.000 hectáreas.

En su intervención, González también ha aludido a la Ley de Recuperación de la tierra agraria de Galicia, cuyos polígonos agroforestales o aldeas modelos "están apostando por los diversos usos forestales a los que habrá que sumar también las potencialidades de las agrupaciones de gestión continua".