Los delincuentes viales en Galicia crecen un 12% en un año: uno por cada 190 conductores

Sin freno. El balance de los delitos al volante pone de manifiesto el olvido en el que han caído las normas de seguridad vial tras la pandemia. En España se batió en 2022 récord de infracciones penales en carretera y de condenas; mientras, en Galicia se ha vuelto a rebasar la barrera de los 9.000 procesos de tráfico abiertos —un 11,4% más que en 2021— con casi 6.400 delincuentes viales sentados en el banquillo —un 12,3% más que el año anterior—. Detrás de estas cifras, según apuntó el fiscal de Seguridad Vial, Luis del Río, está “la pérdida de conciencia vial”, que ha llevado a los juzgados del país más de 105.000 escritos de acusación por delitos de tráfico —el 6% en la comunidad gallega— que derivaron en 105.660 sentencias condenatorias por este ilícito penal. Este balance ha activado las alarmas en Galicia al colocarse entre las autonomías que tienen una mayor tasa de conductores de riesgo. En concreto, un delincuente vial cada 190 automovilistas censados en la comunidad, un 6,5% por encima del índice nacional (un delito contra la seguridad vial incoado por cada 200 conductores), según el análisis de los datos recogidos en la memoria de la Fiscalía Superior de Galicia de 2022.

La entrada en vigor del carné por puntos en verano de 2006 y la reforma penal para los delitos de tráfico de 2007 fueron claves en la reducción de la accidentalidad en carretera. La amenaza de la pérdida del permiso de conducir y el ingreso en prisión trajeron consigo un cambio de comportamiento de los infractores al volante. Pero 17 años después del sistema por puntos, el número de conductores que delinque al volante ha puesto en alerta a las autoridades de Tráfico. Son una media de 760 delitos viarios detectados cada día en Galicia, lo que supone casi el 10% de todas las infracciones penales incoadas en la comunidad gallega.

Pero el porcentaje de conductores que se sientan en el banquillo en mucho mayor respecto a los delitos que llegan a juicio en Galicia. No son las lesiones, las agresiones o los hurtos los que copan la mayoría de vistas en los juzgados gallegos. Son las infracciones penales al volante, un total de 6.378 —una media de 530 cada mes— que acaparan el 40% de todos los delitos con escritos de acusación. Es la cifra más alta desde el año preCOVID. Entonces fueron más de 9.200 los delitos de tráfico incoados (procesos abiertos) en Galicia y más de 6.700, los calificados (llevados a juicio).

En la última década, las cifras de delincuencia vial en la comunidad se habían contenido, moviéndose en torno a los 7.000-8.000 delitos viarios detectados cada año y los 5.000 juicios celebrados. El techo de infractores penales interceptados en la red viaria gallega se había alcanzado en 2011, con más de 11.000. Solo ese año y en 2009 se rebasó la barrera de los 10.000 delitos al volante. Y solo esos dos ejercicios, junto con 2012 —9.840 procesos incoados— y 2019 “—con 9.258— superaron las negras estadísticas de delincuencia al volante del año pasado.

El diagnóstico, según la Fiscalía, aborda la prevención pero también una pérdida de conciencia al volante después de la pandemia y las restricciones. “Indudablemente tras la pandemia y las restricciones hemos comprobado que ha habido un cambio en los hábitos viales de la ciudadanía, se han incrementado estos delitos con una pérdida de conciencia vial tal y como la teníamos hasta no hace mucho”, apuntó el fiscal de Sala de Seguridad Vial. Luis del Río, durante la presentación del balance nacional hace dos semanas.

De las cuatro provincias gallegas, A Coruña y Pontevedra son, por este orden, las que concentran el grueso de los juicios celebrados por delitos de tráfico: 2.564 y 2.407, respectivamente. Entre ambas suman casi el 80% del conjunto autonómico. Lejos de estas cifras están las vistas por infracciones viarias celebradas en los juzgados de Ourense (773) y Lugo (634), según datos de las Fiscalía Superior de Galicia. Mientras en estas dos últimas provincias se produjo una tendencia a la baja, con una caída en los delitos de tráfico con escrito de acusación de casi el 5% en Lugo y del 12,7% en Ourense, en A Coruña repuntaron casi un 8% y en Pontevedra, un 23%. Sin embargo en el caso de los delitos viarios detectados, aumentaron en todas las provincias: Ourense se sitúa a la cabeza de este repunte (23%), seguida de Pontevedra (16%), Lugo (11,18%) y, finalmente, A Coruña (casi un 5%).

Casi 34.000 interceptados sin carné en un año

No han pisado nunca la autoescuela o se ponen al volante tras haber perdido todos los puntos del carné o haberle sido retirado el permiso por orden judicial. Son cada vez más los conductores interceptados sin licencia en las carreteras de la comunidad. Solo el año pasado, fueron casi 3.400 los delitos incoados por conducción sin carné en Galicia, un 7,55% más que el ejercicio anterior. De las cuatro provincias gallegas, es A Coruña la que concentra la mayoría de este perfil (1.311), seguida de Pontevedra (1.279). Muy por debajo de estas cifras, están Ourense (411) y Lugo (371). Pero es el consumo de alcohol y/o drogas, una de las lacras de la accidentalidad en carretera, el principal delito viario. Hasta un total de 5.135 infracciones penales por circular en estado ebrio o bajo la influencia de otras sustancias fueron notificadas el año pasado en Galicia, lo que se traduce en una media de 430 cada mes, el 56% del total de delitos en carretera incoados. A Coruña se coloca a la cabeza, por encima de la barrera de los dos mil —2.077—, seguida de Pontevedra —1.872—. Y finalmente Ourense —606— y Lugo —580—. El resto de delitos al volante se quedan lejos de las cifras de estas dos categorías, siendo la conducción temeraria el tercero en la lista, con de 288 infracciones penales incoadas en la comunidad en 2022. Casi a la par, la negativa a someterse a las pruebas de alcohol (216), por conducir a velocidades estratosféricas (86), con creación de otros riesgos para la circulación (58) y finalmente por conducción con desprecio a la vida de los demás (9).

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