El uso del transporte escolar para viajes regulares se dispara un 155% en tres años

Los autobuses que trasladan alumnos a los colegios permitieron 824.000 desplazamientos de otros usuarios el pasado año | Las reservas para el servicio a demanda subieron un 69%

Paula pérez

Galicia tiene más de 30.000 núcleos de población dispersos por una superficie de 29.574 kilómetros cuadrados y una población cada vez más envejecida que debe desplazarse habitualmente para ir al médico, a hacer la compra o hacer gestiones al banco. El transporte público es la opción más sostenible para moverse, pero es difícil cubrir todo el territorio. Para ello la Xunta decidió aprovechar las plazas libres que quedaban en las líneas de autobús escolar para que prestaran servicio a otros viajeros y lanzar un servicio de transporte a demanda. Desde que se puso en marcha el Plan de Transporte Público de Galicia hace tres años el numero de viajes en autocares compartidos con alumnos se ha disparado un 155 por ciento y las reservas para solicitar traslados a demanda crecieron casi un 70 por ciento.

En la actualidad operan en Galicia 2.243 líneas de transporte compartido, con un total de 24.591 paradas y 756.085 servicios al año. “La implantación de esta modalidad hizo posible multiplicar la cobertura del transporte público, aprovechando la enorme capilaridad de los servicios de transporte escolar”, explica la Consellería de Infraestruturas.

Se maximiza así el uso de las líneas de bus escolares ocupando los asientos vacíos en zonas rurales. Este sistema ha permitido que concellos como Riotorto, Ribeira de Piquín, Carballeda de Valdeorras o A Mezquita, por los que antes no pasaba ninguna línea de autobús regular, dispongan ahora de transporte público.

En estas líneas compartidas se desplazan casi 47.000 estudiantes diarios. Ellos tienen su plaza reservada. Pero además en estos autobuses pueden viajar otras personas que necesiten desplazarse. En 2023 se realizaron 11,2 millones de viajes en estos autocares compartidos, de los cuales 10,3 millones se corresponden con alumnos. Pero hay además 824.262 viajes de otros usuarios que, de otra manera, no dispondrían de transporte público.

“Los datos demuestran que el empleo de esta modalidad por parte de los viajeros del transporte público de uso general es cada vez mayor”, apunta la Xunta.

Los autobuses compartidos funcionan desde 2017, pero en los primeros años su utilización era escasa. Se empezó con 20.279 viajes al año en 2017 hasta alcanzar los 70.231 en 2019.

No fue, sin embargo, hasta que la Consellería de Infraestruturas puso en marcha las nuevas concesiones de transporte público cuando se reforzó este servicio y se incrementaron los usuarios.

En 2021 ascendían ya a 323.000 los viajes realizados en estos buses compartidos, una cifra que se ha multiplicado por 2,5 hasta alcanzar los 824.262 desplazamientos el pasado año. Y solo en los dos primeros meses de 2024 ya se contabilizan casi 200.000 traslados de usuarios que no son estudiantes.

La mayor demanda de este tipo de transporte se registra en la comarca de Paradanta y en O Condado, con 39.109 viajes en 2023. En O Salnés y Poio también ha tenido muy buena acogida con 44.787 desplazamientos y en Verín los traslados superaron los 39.700 el último año.

Por otro lado, está el servicio de transporte a demanda. En total, se ofrecen 2.371 líneas con 22.745 paradas que permiten prestar 630.500 servicios al año.

Los interesados en utilizar estos servicios deben realizar su reserva mediante una llamada telefónica. La central ha recibido desde la activación del sistema un total de 69.189 reservas. La tendencia, en este caso, también ha sido ascendente, según los datos de la Xunta.

Así, el pasado año las llamadas para solicitar plaza en uno de estos autobuses se elevaron a 20.419, lo que supuso un incremento del 34 por ciento respecto a 2022. Si se compara con el inicio del Plan de Transporte Público, en 2021, el incremento fue del 69 por ciento.