Portugueses, rumanos y franceses lideran la compra de casas por foráneos en Galicia

Es la comunidad con menor peso de los extranjeros en las adquisiciones de viviendas, solo el 1,8%, a pesar de la subida constante | En toda España marcan récord: 15%

Una joven observa la oferta de pisos en el escaparate de una inmobiliaria.

Una joven observa la oferta de pisos en el escaparate de una inmobiliaria. / Alba Villar

Julio Pérez

A menudo se vincula la compra de vivienda en España por parte de extranjeros al auge del turismo y de la segunda residencia. Y hay mucho de eso en la espectacular evolución de los adquirientes foráneos en el mercado inmobiliario. Pero el creciente número de operaciones no podría entenderse tampoco sin lo que está pasando en el empleo. En estos momentos hay casi 2,7 trabajadores originarios de otros países de alta en la Seguridad Social tras un incremento del 74% en los últimos diez años; y en Galicia se dispararon un 106%, hasta superar los 59.000. ¿Y cómo se traslada eso a las transacciones de pisos y casas? “La demanda extranjera ha seguido registrando un excelente comportamiento durante el año 2023”, aseguran los Registradores de la Propiedad. El colectivo rozó el 15% del negocio, algo más de un punto por encima del ejercicio anterior (13,7% en 2022) y “nivel máximo de la serie histórica”. Van dos años de intensos incrementos. “Este hecho consolida la demanda extranjera como un factor especialmente relevante —señalan los Registradores— desde el punto de la fortaleza del mercado de compraventas de vivienda en España”.

Sin diferenciar la nacionalidad, el número de operaciones en todo el Estado retrocedió cerca del 10% a lo largo del pasado año a causa del atasco del crédito y del endurecimiento de las condiciones de la financiación desde el sector bancario tras el subidón de los tipos de interés. Se registraron menos compraventas tanto en los clientes nacionales como en los de diferente nacionalidad. “Sin embargo, el crecimiento interanual del peso de los extranjeros —matizan los Registradores en su informe anual— constata cómo su comportamiento fue, en términos relativos, más favorable, es decir, con menores descensos en compraventas”.

En Galicia, de hecho, las compras de viviendas por parte de ciudadanos de otras nacionalidades rompieron la tendencia general del mercado y aumentaron, marcando un máximo histórico. Fueron cerca de 350, un 39% más que en 2022. Solo la pandemia frenó en 2020 la clara racha alcista en las adquisiciones del colectivo. En comparación con los niveles previos al COVID-19, las operaciones se multiplicaron en la comunidad por 3,3. En 2018 supusieron solo el 0,6% de todas las transacciones de inmuebles. En 2023 alcanzaron el 1,8%. Un porcentaje todavía muy discreto, a pesar del fortísimo avance, en comparación con el resto del país. Es la comunidad donde las compras de los extranjeros tienen menor peso.

Baleares está en cabeza con una cuota superior al 31%. Los extranjeros firmaron el 29,3% de las compras en Comunidad Valenciana; el 28,5% en Canarias; el 23,8% en Murcia; el 15,8% en Cataluña; y el 15% en Andalucía. Junto a Galicia, en los puestos de cola figuran Extremadura (1,8%), Castilla y León (3%), País Vasco (3,7%) y Cantabria (3,9%). Los mayores porcentajes y los incrementos más intensos también, como señalan los Registradores, están en zonas costeras de alta intensidad turística. En cuanto a las provincias, entre las gallegas destaca Lugo (2,5% de foráneos en el total de transacciones), seguida de Pontevedra (2,1%) y A Coruña (1,5%) y Ourense (1,5%), ambas situadas en las dos últimas posiciones del ranking por detrás de Córdoba (1,6%), Salamanca (1,6%) y Badajoz (1,7%).

Reino Unido, Alemania y Francia despuntan como principales nacionalidades en el mercado inmobiliario español con porcentajes del 9,5%, 7,3% y 6,7%, respectivamente, en el global de operaciones de foráneos. A continuación se colocan Marruecos (5,4%), Bélgica (5,3%), Italia (5,2%), Rumanía (5%), Países Bajos (4,8%), Polonia (3,6%) y Rusia (3,1%). “El buen comportamiento en la evolución de las compras de vivienda por extranjeros durante los dos últimos años se ha debido, en parte, a la incorporación de nuevas nacionalidades a la compra de vivienda en España, encabezando los resultados las que tradicionalmente lo venían haciendo, pero con un reparto de pesos más amplio y heterogéneo”, explican los Registradores.

El top ten en el caso de Galicia es bastante diferente. Portugal ocupa el primer puesto y con una cuota muy relevante del 13,1% sobre el conjunto de las compras. Ciudadanos rumanos se hicieron con el 5,9%; los franceses con el 5%; alemanes con el 4,5%; el mismo volumen que los italianos y los venezolanos. Completan la nómina los procedentes de Marruecos (2,7%), Reino Unido (2,7%), Estados Unidos (2,7%) y China (2,7%). Las operaciones de compradores naturales de Portugal alcanzan el 21% en Pontevedra y el 28% en Ourense. Lideran también el mercado en A Coruña, aunque con una menor proporción: 7%. En Lugo está Francia en lo más alto: 11%.

Unas 16 operaciones en la comunidad por importes superiores a los 500.000 euros

Los extranjeros optaron en menor proporción por la compra de vivienda nueva (15,8% de sus adquisiciones) que los de nacionalidad española (19,3%). Por país de origen, los que más tiraron de pisos y casas a estrenar fueron belgas (24,3%), neerlandeses (24,2%) y polacos (23,9%), frente a franceses, argentinos e irlandeses, entre los que tuvieron mayor peso los inmuebles usados (90,3%, 89% y 88,8%, respectivamente). La cuota de los pisos y las casas de menor superficie es mayor entre los foráneos. “El hecho de que los nacionales opten en mayor medida por una vivienda principal supone una mayor presión hacia una superficie superior, frente a los extranjeros, con un uso mayor como segunda vivienda, delimitando una exigencia de superficie menor”, detallan los Registradores de la Propiedad. Aunque las diferencias, matizan, “no son especialmente significativas”. De todas las transacciones en el colectivo, el 9,7% fue de viviendas con importes que sobrepasaron los 500.000 euros en 2023. En 2022 se alcanzó el pico con el 10,1%. “Con este resultado se rompe la tendencia alcista que se venía registrando, con siete años consecutivos de ascenso”, señala el informe anual. En Galicia representaron el 4,7%, unas 16 adquisiciones. Las comunidades donde se registraron más operaciones de este valor fueron Baleares (31,7%), Madrid (19, 6%), Andalucía (15%) y Cataluña (12,6%).

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