La Opinión de A Coruña

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Anuladas las bases del desarrollo que aprobó Culleredo y que se enjuicia hoy en vía penal

El TSXG anula la aprobación de estatutos de la junta de compensación del sector donde 21 familias perdieron sus tierras en una supuesta estafa por la que declaran hoy constructores

Terrenos en Vilaboa origen de los pleitos.

El Juzgado de lo Penal Número 4 de A Coruña inicia hoy el juicio oral por presunta estafa a 21 familias de Vilaboa (Culleredo) que perdieron sus tierras después de permutarlas con un constructor a cambio de futuros pisos que nunca se construyeron. En esta primera sesión van a prestar declaración este constructor, Manuel Gómez Landeira; el empresario Dositeo Rodríguez Gómez; y el promotor y presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Antonio Fontenla. Landeira y Fontenla se asociaron para urbanizar y desarrollar estos terrenos, denominados Unidad de Actuación UA-16, y situados en una parcela vacía entre la rúa Alcalde Domingo Sierra y la avenida de Vilaboa (Nacional 550).

A pesar de la existencia de este pleito y el perjuicio a estas familias de Culleredo, el Ayuntamiento aprobó de forma definitiva el proyecto de bases y estatutos de la junta de compensación para iniciar ya este desarrollo y rechazó en enero de 2017 el recurso que presentó un afectado que se quedó sin sus terrenos contra esta aprobación definitiva, impugnando también de forma indirecta el estudio de detalle de este sector.

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Número 4 de A Coruña le dio la razón al afectado en 2021 y ahora el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) acaba de ratificar su decisión, y en una sentencia confirma que la resolución de la Alcaldía de Culleredo no fue “conforme a derecho” y “deja sin efecto la aprobación definitiva del proyecto de bases y estatutos de la junta de compensación”.

La junta de compensación de este ámbito de Vilaboa recurrió el fallo del juzgado pero el TSXG acaba de desestimar su apelación al quedar probado en el juicio que algunas de las parcelas que el catastro asignaba al promotor del desarrollo estaban fuera del ámbito.

Es decir, uno de estos promotores, Monelos Aparcamientos (del empresario Antonio Fontenla), en el momento de la aprobación definitiva de los estatutos y bases de la junta de compensación no era titular del 50% del polígono, requisito imprescindible por ley para poder impulsar el desarrollo, y las parcelas aportadas por el otro empresario, Promociones Naiguata, se incorporaron después. Ante este incumplimiento de la legislación, el Tribunal Superior ratifica que procede la anulación de la aprobación definitiva de los estatutos y bases de actuación.

Permuta en 1999

Esta sentencia del TSXG y el pleito penal que arranca hoy tienen su origen en hechos de hace dos décadas. El constructor Antonio gómez Landeira acordó en 1999 con vecinos de Vilaboa que les entregase sus fincas a cambio de recibir pisos cuando construyese en ellos, una permuta por obra futura. Pero nunca recibieron esta vivienda debido a los problemas económicos de Landeira, que obtuvo un crédito de un millón de euros de Antonio Fontenla, con la condición de devolverlo en seis meses.

Pasado este tiempo el constructor no pudo devolver el dinero y llegó el embargo, por lo que Fontenla (Aparcamientos Monelos SL) pasó a ser propietario de los terrenos que habían permutado los vecinos con Landeira, pues éste los había utilizado como garantía del préstamo. Después ambos se asociaron para urbanizar la parcela y presentaron un estudio de detalle al Concello. Más de una década después, las familias que permutaron no tienen ni los pisos ni compensación en metálico.

Ante esta situación, los afectados recurrieron a los tribunales alegando una supuesta estafa, por la que ya se realizaron declaraciones los empresarios implicados el juzgado en 2013, en la vía civil, donde se les reconoció una indemnización, pero ninguna de las empresas les abonó el dinero.

La unidad de actuación UA-16 figura en el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de 1987 Culleredo como suelo urbano. El estudio de detalle aprobado en 2004 preveía un edificio de bajo y cuatro plantas, que en el PXOM aprobado inicialmente en 2018 pasó a bajo y cinco plantas. En este estudio de detalle consta que el ámbito tiene una superficie de 6.136 metros cuadrados y una edificabilidad de un metro cuadrado por metro cuadrado.

El PXOM aprobado de forma inicial incluye este sector como un área de reparto en suelo urbano no consolidado con 4.019 metros cuadrados (parte de lo que antes era UA-16 ahora pasa a ser de uso comercial y terciario), donde se podrían construir 45 viviendas.

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