En venta una parcela de Costa Miño Golf para un hotel de hasta 160 habitaciones

Costa Miño Golf toma impulso. Las ofertas a la baja de los bancos y la pandemia de la COVID-19 supusieron un importante revulsivo para esta macrourbanización, paradigma del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, y que toma ahora impulso con nuevas promociones. Los vientos inmobiliarios favorables animan a inversores y resucitan antiguos proyectos, como el del complejo hotelero que proyectaba Fadesa y que, como otros tantos servicios de esta zona residencial, naufragó con la crisis del ladrillo.

La inmobiliaria Cisbar anuncia ahora en su portal la venta por 124.600 euros de un solar de usos terciarios-hoteleros propiedad del banco malo, la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).

El anuncio detalla que el terreno dispone de una superficie de 16.073 metros cuadrados y está ubicado en la Avenida de Xarío. El solar, según la información proporcionada por la inmobiliaria, dispone de una edificabilidad de unos 10.000 metros cuadrados y permitiría levantar un hotel de hasta 160 habitaciones.

La parcela en cuestión colinda con la zona de estacionamiento ubicada a orillas de la Avenida de Xarío, a la entrada de la urbanización Costa Miño Golf.

El proyecto gestado por Fadesa hace ya dos décadas y bautizado inicialmente como Costa Anácara preveía la construcción de un hotel de cinco estrellas. Este complejo nunca pasó del papel, al igual que el puerto deportivo y otros servicios de esta “magnífica urbanización única en Galicia”, como se promocionaba entonces, que se fueron a pique tras el estallido de la burbuja inmobiliaria.

Puja de una parcela comercial

El Concello de Miño pretende dotar ahora a Costa Miño Golf de algunos de los servicios que la crisis dejó en el tintero. El Ayuntamiento ultima los pliegos para sacar de nuevo a subasta una de las cinco parcelas que le adjudicó la Justicia. Se trata del solar de usos comerciales para la apertura de un supermercado que ofertó en puja hace ya más de un año sin atraer inversores. Según explicó el Gobierno local, los aspirantes solicitaron un plazo más amplio para analizar la viabilidad del negocio.

El Ayuntamiento miñense prevé también sacar en breve a subasta la parcela con los últimos esqueletos de la urbanización. El presupuesto aprobado hace unos meses preveía ya unos ingresos de 400.000 euros por la venta de este ámbito de 7.800 metros cuadrados de la calle A Fraga.

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