Betanzos tramita un cambio en el plan parcial del polígono de Piadela para ampliar los usos

Presenta a la Xunta una propuesta de modificación del plan parcial para permitir usos comerciales, hosteleros, hoteleros, recreativos y de oficina en este parque a medio gas

Naves del polígono industrial de Piadela, en Betanzos. |   // LA OPINIÓN

Naves del polígono industrial de Piadela, en Betanzos. | // LA OPINIÓN / Antares Pérez

El Concello de Betanzos ha presentado a la Xunta para su evaluación ambiental estratégica una propuesta para la modificación puntual del plan parcial del polígono industrial de Piadela dirigida a flexibilizar los usos para facilitar la implantación de empresas.

El Ayuntamiento plantea dos alternativas y se decanta por la más permisiva. Propone ampliar el abanico y consentir usos comerciales, hoteleros, hosteleros, de oficinas, recreativos o deportivos. El Ejecutivo municipal confía que esta flexibilización avivará el interés de los inversores y les animará a apostar por este parque industrial construido hace treinta años y todavía a medio gas.

La firma encargada de tramitar esta modificación puntual del plan parcial de Piadela, Tysgal Consultores, llama la atención sobre la “baja ocupación” de este parque, conocido especialmente por albergar el centro de distribución de alimentos del grupo Gadisa.

El sector conserva todavía varias parcelas sin urbanizar, colonizadas por arbustos y especies exóticas invasoras, especialmente plumachos.

La ampliación de usos del polígono, pactada entre el Concello de Betanzos y las juntas de compensación ya en el año 2021, propiciará el interés “de inversores y aumentará la demanda de empleos”, lo que “repercutirá en la atracción y asentamiento de población”, defiende el Concello, que argumenta además que el “uso hostelero redundará en un menor número de desplazamientos” con la consiguiente reducción de emisiones.

El documento detalla que los usos comerciales se permitirán con una limitación de superficie de 2.500 metros cuadrado, al igual que el de oficinas o recreativos.

Los promotores concluyen que esta flexibilización de los usos no provocará efectos ambientales y paisajísticos significativos. Vaticinan que “incidirá positivamente tanto en la economía como en la sociedad” y permitirá reducir los residuos de carácter industrial.

El Concello inicia los trámites de esta modificación puntual dos años después de aprobar en pleno un convenio con las juntas de compensación del polígono de Piadela que incluye, entre otros extremos, una ampliación de los usos.

El punto prosperó con los votos del PSOE y PP y la abstención del BNG, que expresó su temor a que este cambio contribuya a desplazar las zonas comerciales a los polígonos y suponga una amenaza para el comercio local.

El convenio recogía también la renuncia a la solución de mejora de conexiones viarias entre las dos fases que recogen las normas subsidiarias por no resultar viable. El Concello se comprometía a recepcionar definitivamente las obras de urbanización y a costear un paso “viable y con las características válidas para el fin previsto”. A cambio, las juntas de compensación entregarán al Concello de Betanzos el importe para la ejecución del paso inferior, 120.000 euros, renuncian al pleito y se comprometen a colaborar en la modificación del plan parcial.